Ecologistas en Acción, SEO/BirdLife y WWF celebran la creación de la comisión mixta para la elaboración del Marco de Actuaciones Prioritarias para las Tablas de Daimiel.
Como las propias Administraciones han declarado, la recuperación del nivel del agua del acuífero, que asegure el mantenimiento del parque nacional a largo plazo, debe ser el objetivo prioritario de este plan de medidas.
Para ello, aprobar y ejecutar soluciones eficaces para revertir la situación de sobreexplotación del acuífero, y frenar las extracciones ilegales y la contaminación del agua en el entorno inmediato es urgente y prioritario.
Ante la puesta en marcha de la comisión mixta entre el Gobierno de España y el de Castilla-La Mancha para la elaboración de un Marco de Actuaciones Prioritarias para el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, Ecologistas en Acción, SEO/BirdLife y WWF consideran que se está creando el escenario oportuno para, de una vez por todas, abordar los problemas que han llevado al deterioro más absoluto a este espacio protegido.
En ese sentido, las ONG ambientales ya vienen reclamando, en especial desde la conmemoración del 50 aniversario del parque nacional el año pasado, que se apliquen a las Tablas de Daimiel los mismos mecanismo de actuación, con las lógicas especificidades, que al Mar Menor o a Doñana. Ni España ni Castilla-La Mancha se pueden permitir el gravísimo deterioro medioambiental de este espacio ni el colapso hídrico, con efectos críticos en la agricultura, que se da en los acuíferos de La Mancha, todo ello con un grave deterioro de la imagen internacional.
Para contribuir con medidas y acciones concretas al contenido del marco de actuaciones, se ha hecho llegar a las distintas Administraciones un primer documento de propuestas consensuado entre las organizaciones ambientales, que plantea una transición justa y progresiva hacia un nuevo modelo de desarrollo territorial y agrícola. El objetivo de este nuevo modelo es que se reduzcan las extracciones de agua para permitir que vuelva a salir agua de forma natural por los Ojos del Guadiana y que ello garantice el futuro de las explotaciones legales de regadío acomodadas a las posibilidades reales de extracción, así como alternativas económicas viables para quienes deban adaptarse a la nueva situación.
El cambio climático no ha hecho sino agudizar los graves efectos de décadas de sobreexplotación de los acuíferos que alimentan al parque nacional (también designado como humedal Ramsar, espacio de la Red Natura 2000 y zona núcleo de la Reserva de la Biosfera de la Mancha Húmeda), contribuyendo a llevarlo a un estado crítico que requiere actuar con urgencia. La complejidad y dificultad para coordinar las actuaciones de las distintas Administraciones sectoriales, estatales y autonómicas, afecta a todas las esferas de la política pública pero no puede ser excusa para dejar desaparecer uno de los espacios que en su día mereció los más altos reconocimientos nacionales e internacionales por sus importantes valores naturales. Es un lugar privilegiado, representante de un hábitat único, que constituye el termómetro del estado de salud de un gran acuífero, el del Alto Guadiana, y una gran Reserva de la Biosfera, la de la Mancha Húmeda, sobre los que hay que asegurar condiciones de verdadera sostenibilidad mediante el equilibrio entre la preservación ambiental y las actividades humanas.
Una oportunidad histórica
La creación de esta comisión mixta supone un gran paso en esa necesaria coordinación entre, en este caso, agua, agricultura y medio ambiente, tres ámbitos clave para el bienestar de nuestra sociedad a largo plazo, y de Las Tablas de Daimiel también. Pero conseguir que el Marco de Actuaciones, objetivo de esta comisión, resulte eficaz requiere que en su elaboración participen además, y lo antes posible, todos los agentes sociales y económicos vinculados, siempre y cuando todos ellos se aproximen a este trabajo desde el compromiso de contribuir a soluciones integrales en beneficio de la naturaleza y las personas.
Ecologistas en Acción, SEO/BirdLife y WWF advierten de que deberán evitarse errores del pasado y crear un escenario nuevo. Medidas como el Plan de Compensación de Rentas o el Plan Especial del Alto Guadiana (PEAG), que supusieron más de 240 millones de gasto público, no consiguieron resultados ni un cambio estructural que permitiera disminuir el volumen de demanda extraído. En la actualidad, esta excesiva demanda de agua supone un déficit de 1.800 hm3, solo en el acuífero de La Mancha occidental, a causa de que se extraen 325 hm3/año de los cuales al menos 90 son de ilegales, muy por encima de lo que se debería extraer para avanzar en su recuperación en los plazos previstos por la Planificación Hidrológica y del parque nacional y para que se inicie el suministro natural de agua a Las Tablas desde Los Ojos del Guadiana.
Las organizaciones ambientales se ponen a plena disposición y con la mejor voluntad de diálogo de las Administraciones y de todos los sectores que puedan estar implicados en la aprobación y desarrollo del Marco de Actuaciones Prioritarias para que esta última oportunidad que tienen las Tablas de Daimiel dé los frutos que garanticen su recuperación.
Medidas prioritarias y urgentes
Para ello, y a la espera de poder participar de manera más activa y estructurada en los procesos y foros que se habiliten con este fin, desde las organizaciones conservacionistas trasladarán de nuevo las medidas prioritarias y urgentes que debe contener este marco: detener todas las extracciones ilegales de agua y la sobreexplotación por parte de las legales, revisar las concesiones y mejorar su control, incluyendo compra de terrenos en zonas clave donde retirar el regadío suponga una posibilidad real de ampliación del espacio protegido o donde se liberen volúmenes para cederlos al humedal de Daimiel mediante los pozos de emergencia; implementar medidas ambiciosas para reducir la contaminación, tanto de origen agrario como del saneamiento urbano, aplicando las mejores tecnologías disponibles y soluciones basadas en la naturaleza; poner en marcha medidas para la viabilidad económica de la agricultura de secano, mejorando los márgenes de los productores con el aumento del valor añadido de la producción con diversas estrategias como la producción ecológica; y desarrollar actuaciones de deslinde y señalización del dominio público hidráulico, de restauración hidrogeomorfológica y de mejora de la vegetación del humedal para recuperar la estructura natural del ecosistema y de su biodiversidad asociada.