En toda Ciudad Real, la comunidad médica, las oficinas de farmacia y los pacientes se enfrentan a una grave crisis debido a la aguda escasez de Ozempic (semaglutida), un medicamento esencial en el tratamiento de la diabetes tipo 2.
En los últimos meses, la situación se ha agravado considerablemente y se prevé que el cierre de este último trimestre sea el peor del año en cuanto a la disponibilidad de este fármaco. Según aseguran desde LUDA Partners, la primera y única red digital de farmacias que se dedica a hacer frente al desabastecimiento de medicamentos en España, en los dos últimos meses, las búsquedas en su herramienta tecnológica han aumentado un 98% respecto a las semanas posteriores al verano.
En este sentido, las farmacias ciudadrealeñas están experimentando un preocupante desabastecimiento de Ozempic, lo que ha llevado a un panorama muy pocas veces visto hasta ahora: listas de espera para los pacientes que necesitan este medicamento para mantener bajo control su diabetes. «Hacía mucho tiempo que no vivíamos una situación así. Tenemos gran cantidad de pacientes que están esperando para poder continuar con sus tratamientos. Además, actualmente, tenemos muchísimas faltas de medicamentos, no solo con Ozempic, sino también con otras medicaciones como por ejemplo, el ansiolítico Lexatin”, comenta Elena Fisac, farmacéutica titular en la Farmacia Fisac Cubillo de Daimiel.
De este modo, el impacto de esta escasez se ha hecho sentir entre los propios pacientes diabéticos, quienes se encuentran en una situación de incertidumbre y preocupación por la falta de acceso a un tratamiento que controla de manera eficaz los niveles de glucosa en sangre y reduce el riesgo de complicaciones cardiovasculares.
El testimonio de la Farmacia Fisac Cubillo, que forma parte de la red de farmacias LUDA, refleja la frustración que enfrentan a diario al no poder dispensar el medicamento a aquellos que lo necesitan. «Los pacientes están bastante preocupados. Algunos han tenido que volver al médico para que les cambien los tratamientos. Sin embargo, no todos ellos responden igual ante estas variaciones de medicamentos. Es una situación delicada que impacta directamente en la calidad de vida de quienes conviven con la diabetes«, agrega Fisac.
Ante este escenario, tanto profesionales de la salud, como autoridades farmacéuticas, se encuentran buscando soluciones urgentes para intentar paliar la escasez y garantizar el acceso continuo a tratamientos esenciales para los pacientes diabéticos. Por su parte, desde el Ministerio de Sanidad piden que estos medicamentos se prescriban solo para uso autorizado, tratando de evitar así su desabastecimiento, pues análogos como Trulicity, Victoza o Fiasp también están presentando problemas de suministro.
La falta de Ozempic, en sus tres presentaciones diferentes, ha intensificado la presión en las farmacias y el sistema sanitario en su conjunto. Los pacientes se ven forzados a volver a consulta al no encontrar su medicación, sin garantías de poder llegar a tener un nuevo tratamiento pautado, que podría no resultar el más efectivo para sus necesidades médicas individuales.
Las farmacias colaboran para hacer frente al desabastecimiento de medicamentos
Aunque algunos medicamentos pueden tener sustitutos, si el médico ha prescrito una presentación concreta, los farmacéuticos, en muchos casos, no están autorizados a cambiar el medicamento del paciente por otro equivalente.
Por ello, si la farmacia no puede dispensar el medicamento debido a que presenta problemas de suministro, el paciente debe regresar al médico, informarle sobre la situación y que este le cambie la receta. Sin duda, todo un proceso tedioso y que se dilata en el tiempo incidiendo directamente en pacientes con afecciones graves y sobre el sistema sanitario, saturándolo aún más si cabe.
Es precisamente ante crisis como esta, cuando resulta tan necesaria la colaboración de las boticas a través de propuestas tecnológicas como la herramienta LUDA. Gracias a esta sencilla, pero eficaz solución, los pacientes pueden acudir a su farmacia de referencia y en caso de que existan problemas de suministro en este tipo de tratamientos, los farmacéuticos pueden localizar los medicamentos necesarios a través de una búsqueda inmediata en la herramienta LUDA y aportar una solución al instante.