El Consejo de Gobierno ha autorizado el gasto de casi dos millones de euros para llevar a cabo la supervisión del funcionamiento de las depuradoras gestionadas por la entidad de derecho público Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha, adscrita a la Agencia del Agua de Castilla La Mancha, de la Consejería de Desarrollo Sostenible.
Así lo ha dado a conocer hoy la consejera Portavoz del Gobierno regional, Esther Padilla, en la rueda de prensa semanal para dar cuento los acuerdos adoptados por el Ejecutivo de Castilla-La Mancha en Consejo de Gobierno
Según sus palabras, se trata de llevar a cabo una supervisión de 239 depuradoras que prestan servicio a 248 municipios de la región y a un total 492.128 habitantes “para tener la seguridad de que se cumplen los contratos de explotación, que los equipos funcionan correctamente, que haya los operadores necesarios, que se realizan también las visitas técnicas necesarias o que se invierte todo el dinero asignado para lograr un control constante y que todo este sistema funcione correctamente”, ha alegado Padilla.
De este modo, tal y como ha dado a conocer la consejera, “lo hacemos a través de un contacto estrecho con los ayuntamientos a los que se presta el servicio, ya que desde Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha se colabora con ellos para mejorar la gestión conjunta del ciclo urbano del agua. Damos un paso más colaborando con los consistorios, asumiendo la gestión de muchas de sus depuradoras si así nos lo solicitan”.
Asimismo, Esther Padilla ha recalcado el compromiso del Gobierno de Castilla-La Mancha “con la depuración de aguas urbanas y el respeto al medio ambiente, autorizando así una vigilancia constante de estas infraestructuras”.
Durante su intervención, la portavoz regional ha resaltado “el esfuerzo inversor” que desde el Gobierno del presidente García-Page se va a llevar a cabo el próximo año 2024 en esta materia y ha explicado que “vamos a mejorar aún más los sistemas de depuración, destinando un total de 51 millones de euros desde Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha”.
En este punto, la portavoz del Gobierno ha autonómico ha recordado que bajo el mandato de la ex presidenta de Castila-La Mancha, María Dolores de Cospedal, “se invirtieron cero euros en depuración y se paralizaron un total de seis depuradoras, las de Alcaraz, Cebolla, Mesegar de Tajo, Montearagón, El Picazo y Tórtola de Henares. Unas obras reanudadas bajo el mandato de Emiliano García-Page “como tantas y tantas obras de todos los ámbitos que tuvimos que recuperar, asumiendo los gastos de sus paralizaciones”, tal y como ha recordado. En este punto, ha explicado que desde el Ejecutivo regional se ha asumido la cantidad de seis millones de euros por dichas paralizaciones y las indemnizaciones correspondientes.
Por todo ello, Esther Padilla ha señalado que “somos conscientes de la necesidad de depurar correctamente nuestras aguas residuales. No sólo por la obligación de cumplir con las normas que como europeos nos hemos dado, sino por nuestras obligaciones con el medio ambiente que nos acoge y con las generaciones venideras”; por lo que ha añadido que, en la actualidad, “estamos trabajando en un total de 23 nuevas depuradoras y la inversión realizada, desde 2015 hasta 2022, alcanzó la cantidad de 69,4 millones de euros, cifra que se incrementará con otros 73 millones de euros cuando finalicen las obras que tenemos en marcha; habiendo invertido en esa fecha, en materia de depuración, un total de 143 millones de euros”.
Agua depurada con horizonte 2032
Además, la consejera ha hecho referencia a que todas estas infraestructuras se enmarcan en el Plan de Depuración del Agua, con el horizonte 2032, “para cumplir con la economía circular devolviendo el agua en las mejores condiciones, uno de nuestros objetivos principales en la labor de Gobierno”. Ha hecho hincapié en que es “un plan que contempla todas las infraestructuras que se estiman necesarias para alcanzar el objetivo de depurar las aguas residuales de la región y con ello cumplir la normativa europea, mejorando así el estado de las aguas superficiales de Castilla-La Mancha”.
Por último, la portavoz del Gobierno de Emiliano García-Page ha insistido en “el compromiso para que toda el agua de Castilla-La Mancha que se va a verter a los cauces de los ríos esté depurada en 2032”, a lo que ha reiterado que, para alcanzar tal objetivo, “desde el Gobierno regional estamos invirtiendo un total de 600 millones de euros con los que sacaremos adelante un total de 629 depuradoras”.
El año que viene está previsto tanto finalizar como poner en marcha numerosas infraestructuras de depuración para el correcto tratamiento de aguas residuales como en Tobarra, La Gineta y Mahora (Albacete); San Clemente-El Provencio (Cuenca); Sigüenza, Uceda (núcleo, Fase I y Fase IV) y Chiloeches (Guadalajara); y Cebolla, Montearagón, Mesegar y Villanueva de Alcardete (Toledo).