La Escuela de Catadores de Campo de Criptana ha vuelto a ser sede del último curso de verano de la Universidad de Castilla-La Mancha que se celebra en el municipio, en esta ocasión centrado en el emprendimiento y la promoción del turismo sostenible.
Un alumnado de 25 estudiantes del grado de Turismo, ADE aplicado a este sector y del master de Dirección de Empresas Turísticas, la mayor parte del campus de Cuenca, se han beneficiado del curso ‘Emprendimiento y Promoción de Turismo Sostenible en Castilla-La Mancha’, el último del ciclo de verano de la Universidad Regional; en el que también se ha implicado, con la programación de actividades complementarias, el Aula ‘Tierra de Gigantes’.
El alcalde de Campo de Campo de Criptana, Santiago Lázaro, agradeció la confianza que tanto la Universidad de Castilla-La Mancha como su rector, Julian Garde, están depositando en el municipio como sede universitaria, en especial de los cursos relacionados con el turismo sostenible.
En cuanto a este último curso, Lázaro puso en valor la posibilidad que ofrece a los futuros profesionales del sector turístico de “conocer experiencias que funcionan, como es el caso de Cuenca y de Campo de Criptana, a través del desarrollo del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino que tenemos en plena ejecución”.
Un plan del que resaltó el objetivo de poner en marcha acciones e iniciativas que perduren en el tiempo como el Festival AirénFest, el Tren de los Molinos, la mejora de la accesibilidad de la Sierra de los Molinos o los propios cursos de formación universitaria, “para seguir avanzando, innovando y mejorando como destino, conjuntamente con los profesionales y el sector privado”.
Este último curso universitario de verano ha estado centrado en proponer estrategias para el emprendimiento y las empresas turísticas, en cuanto a mejora en la promoción de sus productos, la reducción de recursos para hacerlas más sostenibles, la puesta en valor del patrimonio histórico y cultural o el uso de las redes, entre otros asuntos. “El objetivo es favorecer que lugares como Campo de Criptana, que tienen mucho que dar, mucho patrimonio y mucha historia que contar, sean un destino turístico atractivo y sostenible”, explicaba uno de los codirectores del curso, Pablo Ruiz.
“Este curso es una oportunidad para quienes se están formando en materias relacionadas con el turismo, aprendan a ver las oportunidades, desafíos y riesgos a la hora de emprender”, añadía otro de los codirectores, Ricardo Martínez.
Además de la formación, el alumnado pondrá en debate lo aprendido, para intercambiar ideas y conocerá ‘in situ’ las posibilidades que ofrece Campo de Criptana, a través de una visita guiada y la degustación de productos gastronómicos locales.