Un punto caliente del Campo de Montiel y Alto Guadiana ante las grandes tormentas es Carrizosa, al atravesar y confluir en su término un arroyo y un río. Ayer tarde, el arroyo de la Retuerta y el río Cañamares se desbordaron debido al alto volumen de agua caída en apenas media hora, arrastrando mucho barro a algunas calles colindantes y, por fortuna, sin más incidencias.
“En torno a las 13 horas y durante media hora, cayeron unos 60 litros, una barbaridad, especialmente en las partes altas del pueblo, como suele ocurrir. Una vez dejó de llover, operarios del Ayuntamiento facilitaron el tránsito con máquinas retroexcavadoras, y esta mañana hemos estado limpiando desde primeras horas de la mañana”, comentaba su alcalde Pedro Antonio Palomo.
Palomo, que pide prudencia a la población al atravesar esas calles, recuerda que el viernes pasado inspeccionaron sendos cauces fluviales a su paso por la localidad, que se encontraban limpios, añadiendo que “las mejoras en el canal realizadas estos años de atrás debido a las inundaciones registradas en el año 2018, han servido para que esta vez fuera menor la incidencia”.