Vicky Moraleda.- En un mundo donde la estética y la imagen personal juegan un papel crucial en la percepción de uno mismo y la interacción con los demás, es esencial explorar cómo podemos abrazar una estética profesional más auténtica y saludable, alejada de las trampas del postureo superficial.
En este artículo quiero que exploraremos de manera integral cómo podemos cultivar una imagen profesional genuina, resaltando la importancia que tienen la autenticidad y la salud mental en el proceso.
El Impacto de la Imagen Profesional
La imagen profesional no solo trata de la ropa que usamos o cómo nos peinamos; es en su conjunto un reflejo de nuestra identidad. Sin embargo, en el afán de proyectar una imagen impecable, a menudo caemos en el error del postureo, donde la autenticidad se sacrifica en aras de impresionar a los demás.
Este enfoque puede ser perjudicial a largo plazo, ya que socava nuestra autoestima y crea una brecha entre nuestra identidad real y la percibida.
La Búsqueda de la Autenticidad
La verdadera estética profesional se basa en la autenticidad. En lugar de intentar encajar en un molde predefinido, debemos abrazar nuestras peculiaridades y singularidades. Esto no solo nos hace sentir más cómodos en nuestra piel, sino que también nos permite destacar en un mundo saturado de uniformidad.
Algunas formas de cultivar la autenticidad incluyen:
1. Conócete a Ti Mismo/a
Antes de intentar proyectar una imagen determinada, es esencial comprender quién eres realmente. Reconocer tus fortalezas, debilidades e intereses te permitirá alinear tu imagen con tu verdadera identidad.
2. Viste para Ti Mismo/a
La elección de la ropa y el estilo debe ser un reflejo de tu personalidad y comodidad en lugar de seguir las tendencias efímeras. Vestirse para uno mismo crea confianza genuina en lugar de depender de la validación externa. Lo que te pones habla de ti.
3. Comunicación Auténtica
La forma en que te expresas verbal y no verbalmente también juega un papel fundamental en tu imagen. Una comunicación honesta y auténtica crea conexiones más sólidas y duraderas en el entorno profesional.
Priorizando la Salud Mental
En la búsqueda de una estética profesional saludable, no podemos pasar por alto la importancia de la salud mental. El estrés y la presión por mantener una imagen perfecta pueden tener efectos perjudiciales en nuestro bienestar psicológico.
Aquí te dejo algunas formas de priorizar la salud mental:
1. Establecer Límites
Es fundamental establecer límites claros entre el trabajo y la vida personal. Esto permite momentos de relajación y recarga, lo que a su vez contribuye a una mente más clara y enfocada en el entorno laboral.
2. Practicar el Autocuidado
El autocuidado es esencial para mantener un equilibrio saludable. Ya sea a través de la meditación, el ejercicio regular o la búsqueda de pasatiempos gratificantes, invertir tiempo en ti mismo/a fortalecerá tu resiliencia ante el estrés.
3. Buscar Apoyo
No debes tener miedo de buscar apoyo cuando lo necesites. Ya sea a través de amigos, familiares o profesionales de la salud mental, hablar sobre tus preocupaciones puede aliviar la carga emocional.
En resumen, la búsqueda de una estética profesional más sana y sin postureo se reduce a abrazar la autenticidad y priorizar la salud mental, a cultivar una imagen que refleje quién eres realmente y al mismo tiempo cuidar de tu bienestar psicológico.
Recordemos que la verdadera confianza proviene de ser fieles a nosotros mismos y vivir una vida auténtica.
La escuela de Vicky Moraleda
Desde mi centro formativo en Estética Profesional y Maquillaje, se cultiva la introspección del alumno para encontrar en primer lugar ese espacio de conexión más íntimo consigo mismas, es aquí donde desparecen las etiquetas y se muestra que la estética es bienestar y un ejercicio de auto amor para con nuestros clientes y hacia nosotras mismas, desde ese espacio es donde hay que acompañar al otro, sin prejuicios ni juicios sobre nuestra piel y nuestro cuerpo.