Eduardo Muñoz Martínez.- Nos lo decía Jesús Miguel Gracia Ocaña, director de la Banda de Música de la Agrupación Musical de Ciudad Real: «Estamos tratando, al igual que prácticamente todos los pueblos y ciudades, nuestro encuentro de bandas anual, y que llegue a ser «obligatorio», y se convierta en una tradición musical como en el resto de España. Este es el segundo, y ya estamos preparando el tercero».
Y así es. Anoche, en un marco tan incomparable como es el Templete de los Jardines del Prado, y ante un numeroso público, como puede verse en las imágenes, y una representación de las autoridades locales, se desarrolló esa segunda convocatoria, en la que intervinieron la Banda Sinfónica del Circulo Católico de Torrente, que dirigida magníficamente por Ángel Chulia Galdon, nos ofreció temas cómo «Camino de Rosas», de José Franco; «La leyenda del Maracaibo», de José Alberto Pina; «Hispania», de Óscar Navarro, y «Lo cant del valencia», de Pedro Sosa.
Por su parte, la Banda anfitriona, bajo la batuta de Jesús Miguel Gracia Ocaña, interpretó composiciones tales que «Symphonic Overture», de James Branes; «Marcha Eslava», de Tchaikwoski; «Paconchita», de T. Hoside, y «El Conbanchero», de N. Iwai.
No nos mueve ningún interés particular, si decimos, a tenor de la reacción del público, que ambos «colectivos» musicales brillaron anoche en Ciudad Real.
Deseamos, utilizando el argot taurino, que cuaje el proyecto de estos encuentros de bandas de música y que pronto sean un referente en la programación cultural de la capital.