Cientos de personas acudían esta mañana a Alarcos para presenciar la procesión alrededor de la ermita de la copatrona de Ciudad Real. Antes, a las once, se celebró una función religiosa en honor a la Virgen, que contó con la participación del Coro de la Cofradía Virgen de la Cabeza.
Fotos: Eusebio García del Castillo Jerez
Tras la misa, a la que asistió un nutrido grupo de representes políticos, incluidos el presidente regional del Partido Popular, Paco Núñez, la alcaldesa de Ciudad Real en funciones, Eva Masías, y el que será próximo regidor municipal, Francisco Cañizares, se llevó a cabo la bendición de medallas de la Hermandad. A continuación, los mozos de Valverde, entre vivas de los fieles, sacaron en procesión la imagen de la Virgen de Alarcos, acompañados de la Banda de Música de Ciudad Real.
Finalmente, Silvia Fernández, de Valverde, recibió el bastón como nueva hermana mayor de la Hermandad de Alarcos de manos de su antecesora, Chon Segura. Su presidenta, Frasi López, alababa el trabajo de la nueva Junta Directiva y el éxito de asistencia cosechado en esta edición de la romería. Anoche, comentaba, el entorno de la ermita estaba lleno, “lo que hacía muchísimos años que no se veía”.
La regidora municipal en funciones, Eva Masías, mostraba su satisfacción porque “ya desde al año pasado la romería de Alarcos renovó ese empuje después de la pandemia y este año hemos querido hacer una semana de Alarcos extraordinaria con conciertos como el del cantante Maka, Pablo López, la celebración de la Noche Blanca o el Campeonato nacional de globos aerostáticos, porque sabemos que hay que potenciar nuestra romería para que sea extraordinaria y así ha sido este año”.
Tanto el diputado nacional Ricardo Chamorro, como el diputado regional, Francisco Núñez, incidían en la importancia de esta romería en la que “se recupera la esencia de nuestra ciudad, de nuestras tradiciones y nuestros orígenes, en un acto de recuerdo y de memoria, ya que el cerro de Alarcos vio el primer asentamiento de lo que hoy es nuestra ciudad”, en palabras de Francisco Cañizares, miembro en funciones de la Corporación Municipal.
Las peñas ofrecieron limoná y platos tradicionales a los fieles y visitantes, como colofón a la fiesta. Antes de los principales actos de este 5 de junio, la jornada arrancaba a las ocho de la mañana con el Rosario de la Aurora. Posteriormente se ofreció mistela y pastas de té a los asistentes por parte de la Federación de Peñas de Ciudad Real.