Jesús Millán Muñoz.- Antonio Gala el casi inmortal poeta de la entrevista, ese ser que envolvía la palabra con las retóricas de siglos, esa persona que hacia teatro de su persona-personaje al mirar la cámara.
A. Gala ha fallecido. Ha llegado al lugar y al tiempo, que al menos, desde hace millones de años, todos los seres humanos y todos los seres vivientes, es el fin de su río que va a detenerse en la Mar, en la mar de la Mar –unos, piensan, que con este fin, termina todo lo humano único e individual, otros piensan que existe Otra Orilla y Otro Mar Inmenso con el Inmenso Ser Personal-. A. Gala que estuvo de joven, en aquellos tiempos de Europa y de España en la cartuja, A. Gala suponemos e imaginamos que en el último momento de meses y años de grave enfermedad, ya se habrá quitado la máscara y se habrá dejado pasear y besar y caminar con el Buen Dios Eterno.
Este artículo es homenaje a A. Gala, no lo debe usted dudar, pero los homenajes se pueden realizar de muchas maneras. El día que ha fallecido y el siguiente, habrá dos grandes acontecimientos informativos en nuestro terruño: uno, las elecciones municipales/autonómicas, otro, los grandes recuerdos a Gala. Gala nacido en la Mancha, por esas costumbres, que las madres iban a hacer nacer sus retoños con sus madres, pero que siempre se crió y se creó en Córdoba/Sevilla, pero en la adultez en Madrid… Podríamos indicar que es hijo de esas ciudades, sin contar sus viajes, sin contar su finca en Málaga, sin contar su Fundación en Córdoba, para buscar-rebuscar nuevos talentos que se encuentren a si mismos y despierten floreciendo con signos y símbolos…
En la columna, diría microcolumna, publicada en El Mundo, titulada Arco, firmada-publicada el 16 de febrero del 2010, nos habla del arte y del Arte y de las Artes, en unas tres centenas de palabras, El autor más hibrido, de quizás toda la cultura hispana, que intento unir bajo la oratoria, la retórica, la erudición a distintos autores, distintas sensibilidades, distintas estéticas de los modos de pensar, sentir, desear, hablar, percibir. En definitiva, diferentes estéticas del mirar.
Todo Arte/arte surge de lo profundo del interior. El exterior, en muchos sentidos, es un óbice, una realidad externa, una excusa. Pero de ese enamoramiento entre lo interior y el exterior, surge el arte/artes. Da lo mismo, si es construido y amasado y cocinado con palabras o con colores o con plumas como en pueblos americanos, con movimientos, con sonidos, con sabores… es intentar desde el fuera hacer emerger el interior, de un sujeto, que es a su vez, el compendio y síntesis de un sujeto colectivo. Hemos mirado la esfera y la espera del ser y del estar. Somos tantas cosas, que necesitamos unificarnos. El arte y artes no es ciencia, pero cumple algunas funciones semejantes, a todo saber, intentar entendernos y comprendernos en este volcán de ser que somos. Somos más de lo que pensamos, somos más de lo que estamos, somos más de lo que deseamos…
Antonio Gala, que antes el de Antonio tenía una decena de nombres. Antonio Gala que es un misterio y un enigma, como todo ser humano, se sea poeta o se sea pastelero. Todos somos un misterio y un enigma para nosotros mismos, un misterio y enigma para los demás. Con la ciencia y ciencias, la filosofía, las teologías-religiones, las técnicas-tecnologías, las artes y el arte intentamos utilizar herramientas para descifrarnos. A. Gala que estaba en el silencio por la enfermedad ya hace unos años. A. Gala que se apoyaba en bastones, como imagen y estética, pero que se apoyaba en las palabras-ideas-imágenes para intentar entender-comprender un mundo. Sentir que su realidad es una especie de ser y estar en el mundo. Que tiene sentido. Todo el mundo busca y rebusca en su interior-exterior el sentido del mundo y de su mundo…
Con sus obras de teatro, con sus paisajes con figura, con sus novelas, con sus poemas, con sus artículos, con sus guiones quiso, como todo ser humano, dejar algo de sí en este mundo, dejar algo de sí que permaneciese después de él, dejar algo de sí y mezclarlo y combinarlo con todos los sentidos del mundo existentes hasta el momento.
Todo ser humano, visto desde dentro, visto desde fuera, siempre con percepciones limitadas, incluso el mismo yo, no se entiende y no se conoce del todo, ni el mismo yo, es conocido y entendido por lo cercanos totalmente, ni el mismo yo, es conocido por los otros. Todo ser humano lleva sombras y claridades, unos más que otros, unos más grandes que otros, unos más extensas que otros, unos con más tiempo que otros, unos en más temas que otros, unos que desean clarificar y curar las sombras, y, otros, que parece se van metiendo más y más, haciéndolas más obscuras. Todos con las heridas y los traumas y las alegrías originales y las felicidades y los amores y desamores que tanto intentó comprender y entender A. Gala.
Mi homenaje al gran Gala, que deseo y espero se haya encontrado con el Gran Ser de la Eterna Cartuja, y, con el gran Gala que espero que el purgatorio de los escritores, sea en su caso, pequeño y solo de meses, y, que empecemos a recordar y revalorizar y rebeber sus palabras y sus ideas y sus imágenes y sus metáforas que nos dejó en poemas, entrevistas, guiones, teatro, novelas, artículos… al gran Gala uno de los grandes escritores-perceptores-sentidores-habladores más grandes, de los que han pasado por esta Piel de Toro, siglo tras siglo. Descanse en la Eterna Mano del Buen Dios…