Las saetas y el sentimiento cofrade han regresado a Puertollano en un ambiente multitudinario animado por el buen tiempo. La procesión de Jesús entrando en Jerusalén ha abierto este Domingo de Ramos la semana de pasión en Puertollano, con el protagonismo de la Cofradía de la Vera Cruz y Nuestra Señora de la Soledad.
La salida de esta procesión con Jesús en la borriquilla se caracteriza por la amplia presencia de palmas que simbolizan su entrada a Jerusalén y la gran participación de niños.
Entre ramas de olivo, los jóvenes tamborileros iniciaron el camino de la calle Hospital entre la expectación de los puertollaneros que aguardaban con ramas de olivo en mano. La procesión, en la que también han participado otras cofradías de la ciudad, ha sido cerrada por la Banda Sinfónica de Puertollano.
El recorrido ha estado salpicado por las saetas de los fieles, que han deparado emocionantes momentos.
La Cofradía de la Veracruz y Nuestra Señora de la Soledad fue fundada en el siglo XVI. Su imagen titular es Nuestro Padre Jesús en su entrada triunfal en Jerusalén. Fue adquirida en el año 1955 en los talleres de arte Cristiano de Olot, y el autor del molde es Jaime Martrus y Riera.