Francisco José Sarrión.- Este sábado hemos realizado un año más una plantación por la paz en el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, recordando el aniversario del asesinato de Gandhi (30 de enero) por su lucha noviolenta por la independencia de la India, con la cual cambió el futuro de este país y alimentó el espíritu y las estrategias de lucha política del siglo XX.
Como siempre, queremos que este acto sea tanto un símbolo del mundo en que queremos vivir con un ejemplo de participación activa en su construcción. Del mismo modo que la semilla contiene el germen de un nuevo árbol, la noviolencia es la semilla de la paz, es decir de un mundo en que la vida y las condiciones que la hacen digna de ser vivida sea el principal objetivo de desarrollo personal, social y planetario.
En una situación mundial y nacional cada vez más violenta, no solo por las guerras que sufrimos, sino por un sistema que causa gran desigualdad, pobreza, degradación ambiental, catástrofes climáticas, migraciones y múltiples violaciones de derechos humanos, la noviolencia sigue siendo la única salida justa y con futuro para todas.
En las Tablas de Daimiel y Villarrubia, en el 50 aniversario del Parque Nacional, la noviolencia se plasma en la renaturalización de las tablas fluviales mediante la eliminación de los drenajes y presas que han alterado su cauce y en la reducción de los regadíos hasta conseguir un equilibrio que permita a los Ojos del Guadiana manar de nuevo con regularidad.
En la política española, la noviolencia se traduce en la neutralidad saliendo de la OTAN y la geopolítica belicista, en la disminución del gasto militar, que este año ha tenido el mayor incremento de la historia de la democracia, el cese de la venta de armas a países en conflicto como Ucrania, la presión activa a nivel internacional para conseguir la firma de la paz en todos los conflictos bélicos, así como el destino del gasto militar a las necesidades sociales básicas: sanidad, educación, cuidados y una nueva política hidrológica, agrícola, energética y mediombiental, para conseguir un equilibrio ecológico sostenible en el tiempo.
Convocados por más de una decena de colectivos ecopacifistas, feministas y ambientalistas, han asistido unas 75 personas, entre las cuales había varias familias con bebés y niños pequeños. A pesar del fuerte frío y viento del día, se han sembrado varios cientos de bellotas y semillas de espino albar en la zona de repoblación, en las cercanías del centro de visitantes. Debemos destacar la negativa de la dirección del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel a proporcionar una sala cubierta para los asistentes, a pesar de que llevamos varios años demandándolo, junto a conceder mayor importancia y apoyo a los colectivos sociales, como contribuyentes y destinatarios de parte de los objetivos de los parques nacionales.
Colectivos convocantes:
Alianza por el Clima de Ciudad Real.
Anea, Estudio y Defensa de la Naturaleza.
Colectivo Pacifistas Ciudad Real.
Defensa Animal Daimiel.
Ecologistas en Acción de Ciudad Real.
Ecologistas Manchegos de Daimiel.
ESN UCLM.
Feministas de Pueblo.
Greenpeace Alcázar de San Juan.
Mesa del Clima de Daimiel.
Plataforma 0,7% + Ya de Daimiel.
Stop Arboricidio Daimiel.
Stop Malos Olores en Daimiel.
SOV CGT Alcázar.