La Policía Nacional rescató in extremis a una mujer de 32 años de edad que se disponía a precipitarse desde la tercera planta de un céntrico residencial de la capital. Los agentes accedieron al inmueble colindante desde donde aplicando los protocolos asistenciales de urgencia y se solicitó a la joven el retorno a una posición segura; mientras, otros dos agentes lograban escalar al interior del inmueble, que se encontraba cerrado, y sorpresivamente sujetar y recuperar a la víctima hacia el interior donde fue asistida por servicios médicos y trasladada al Hospital de Ciudad Real.
Fue la llamada de un vecino al 091 en la madrugada del domingo avisando de que una chica estaba trepando por la terraza de un edificio lo que puso en alerta y activó el protocolo del CIMACC-091 ante tentativas autolíticas con el destacamento de dos unidades de la Policía Nacional y posteriormente de Servicios Sanitarios y Bomberos de Ciudad Real.
Según han informado fuentes policiales, la víctima, que por su comportamiento mostraba una posible intención suicida, había accedido desde la terraza del edificio colindante a un bloque de viviendas contiguo y se había encaramado de pie en el alféizar de una ventana del tercer piso apoyada en el toldo que le servía como única sujeción.
Las gestiones de los policías desde la vivienda continúa resultaron infructuosas si bien lograron que la víctima asegurase su posición cuando accedió a sentarse sobre el alféizar de la ventana. Fue en ese preciso momento cuando dos agentes uniformados, que habían accedido previamente interior del piso trepando desde la vivienda contigua, ya que la vivienda estaba cerrada, sujetaron sorpresivamente a la mujer y pese a su fuerte resistencia lograron a duras penas introducirla a la habitación.
Tras una primera asistencia la mujer fue trasladada al Hospital para su asistencia. El pronóstico de la paciente es reservado.