Primarias

El sistema de Primarias en los partidos políticos, lo introdujo por primera vez en España el PSOE en su XXXIV Congreso Federal en 1997.

La finalidad del sistema abierto que representaba el nuevo método de Primarias tenía la finalidad de erradicar el dedazo de los dirigentes asentados o minimizar la cooptación de sus cúpulas, a los afines y asimilados.

Dando como resultado del procedimiento, un intento –esforzado y torcido en ocasiones e imprevisto en sus resultados en otras– de erradicar las prácticas clientelares y plantear un sistema participativo y abierto, donde los potenciales candidatos podían postularse a sí mismos o ser propuestos por grupos de afiliados.

No sólo, o no sólo exclusivamente propuestas por la dirigencia.

El modelo tuvo tal fortuna social que los restantes partidos, imitaron el método participativo y abierto de las primarias.

Incluso, para proyectar a la sociedad la normalidad y la transparencia de los procesos internos en el seno de los partidos políticos.

Desde IU al PP, adoptaron el esquema y el método de las Primarias.

Otras cosa serán los resultados de la practica participativa.

Por lo que algunos –de todos los colores posibles– acaban poniendo reparos a los resultados habidos: desde la caída de Almunia, al ascenso de Zapatero; desde el triunfo de Casado al de Llamazares.

Por lo que ha habido en los años transcurridos desde 1997, diferentes enmiendas y rectificaciones a la pureza del procedimiento.

Tratando de limar aristas y tratando de reducir filos cortantes.

Tratando de ahormar o prever los resultados y en evitación de vuelcos imprevistos.

Como el obrado por Sánchez frente a Susana Díaz en 2017.

Como estamos –por si no lo hubieran observado, pese a todo– en un año plenamente electoral, las maquinarias electorales se han puesto en marcha, si es que alguna vez paran y no actúan.

Es por ello, que el PSOE afronta a partir de la próxima semana el proceso para elegir candidatos para las elecciones municipales y autonómicas de mayo de 2023, siguiendo el calendario de primarias aprobado a finales de julio en el Comité Federal, decía el 15 de septiembre el digital Huffpost.

Aunque la velocidad sea relativa, como ha ocurrido en el caso de las Primarias para las municipales de Madrid.

El PSOE está buscando para el Ayuntamiento de Madrid –tras la solicitud de aplazamiento de Primarias– un perfil “potente socialmente, reconocible, con ambición y querido” por la ciudadanía, sin tener por qué ser un ministro, una opción que no está descartada del todo.

Hasta ahora han sonado –como una indicación que retoma el viejo dedazo secular– los nombres de ministros como Fernando Grande-Marlaska, Margarita Robles, Pilar Llop, Reyes Maroto o Félix Bolaños como posibles candidatos.

Aunque la mayoría de ellos han dicho en público o en privado que no contemplan esta opción.

Tendrían que pasar un proceso dudoso y vacilante de Primarias, que podrían no ganar, tras haber renunciado al Ministerio de marras.

Y después, superar la revalida de las elecciones del 28 de mayo de 2023, para demostrar su peso real.

Estos son los condicionantes que pesan –dicen que han pesado y mucho– en la propuesta –movida y rumoreada desde Ferraz– de Isabel Rodríguez para desbancar al díscolo García Page, como candidata a las Autonómicas de Castilla-La Mancha.

Como norma general, el PSOE no contempla primarias en aquellos lugares donde haya un socialista al frente de un Gobierno que desee repetir en el cargo, a no ser que lo reclame más de un 50% de la militancia de la agrupación.

Y de aquí el insólito caso de Ciudad Real.

Donde se proclama candidata exenta de primarias, a la Vicealcaldesa Pilar Zamora Bastante.

Vicealcaldesa que dejó de ser Alcaldesa en mayo de 2021, merced a los acuerdos tejidos e hilvanados entre el PSOE y C`s en 2019.

Que contemplaban una rara rotación en las cabeceras de los municipios de Ciudad Real y Albacete.

Como si de la vieja restauración decimonónica se tratara.

Cuando lo normal, habría sido una formula estable en los cargos: Alcaldía para el partido más votado y Vicealcaldesa para el segundo en el acuerdo o pacto.

Pero optaron por una fórmula tan problemática en el presente del 2019 como en el presente de 2022.

Por lo que, para encajar la proclamación de candidata sin Primarias, han tenido que recurrir al hecho incuestionable de “que el PSOE gobierna en el Ayuntamiento”.

Para eludir el mandato imperioso del Reglamento de Primarias.

“Que el PSOE gobierna en el Ayuntamiento” es una verdad a medias.

Ya que lo hace en coalición con otro partido que, para mas curiosidad, desempeña la Alcaldía en los dos últimos años de mandato, como así se acordó en los pactos de 2019.

Y que, incluso, sustenta otras responsabilidades visibles

No puede decirse, consecuentemente, que la candidata proclamada sin Primarias sea la actual Alcaldesa, por más que lo haya sido entre 2015 y 2021.

Incluso, con un pedigrí municipal que se remonta hasta 2007.

Años de andadura, por tanto.

Por lo que la situación –por mucho fárrago teórico y argumental que se deslice en los razonamientos de las ejecutivas y Comités actuantes en el caso– escapa a la previsiones del repetido Reglamento de Primarias.

Otra cosa será evidenciar las dificultades para encontrar argumentos en favor de la renovación y por ello se opta por la repetición.

O evitar un proceso de Primarias, tan dudoso como se quiera advertir.

Lo iremos viendo.