En estos días, Membrilla celebra una de sus tradiciones más arraigadasen honor a su patrona, la Virgen del Espino, los conocidos como los Desposorios. Unas fiestas patronales que se remontan al Siglo XIII. Ochocientos años de tradición, desde que en 1212 apareciera la Virgen del Espino durante la Batalla de las Navas de Tolosa.
Los Desposorios de la Virgen se celebran el penúltimo domingo del mes de agosto, aunque el jueves previo ya se inician sacando en procesión a San José, desde la parroquia a la ermita de la Virgen del Espino para recogerla y volver a la parroquia.
La Patrona de Membrilla ya está en el pueblo, donde permanecerá hasta el próximo día 22 de agosto, cuando será llevada de vuelta a su ermita.
La patrona tiene su propia guardia de honor, que la escolta en todos los actos y desfiles procesionales durante los Desposorios. Son los alabarderos, fundados en el año 1769 como escolta de las guardias moriscas, como explica Pascual Muñoz Ramos, Alabardero Mayor y uno de los miembros más antiguos de esta escolta.
Como afirma Elena Moraleda, Secretaria General del PSOE de Membrilla: «Los Desposorios son el alma de Membrilla y un punto de encuentro y de concordia para todos en nuestro pueblo, los que vivimos aquí y los que tuvieron que buscarse la vida fuera»
“Nuestras tradiciones forman la identidad y el carácter del pueblo. Por eso, desde ‘Membrilla Mejor’ nos aferramos a ellas, las defendemos y apoyamos”, añadía Moraleda, durante la celebración de la procesión de la Patrona.
Y es que el proyecto ‘Membrilla Mejor’ contempla la puesta en valor de las tradiciones como señas de identidad cultural; defendiéndolas y potenciándolas, además, como atractivo turístico.