El presidente de Globalcaja, Carlos de la Sierra, ha asistido a la inauguración de la XLVIII Feria Internacional del Ajo, que se celebra hasta el 31 de julio en Las Pedroñeras (Cuenca), y donde la entidad cuenta con un expositor en un claro apoyo al sector agroalimentario y, en concreto, a un cultivo estratégico para Castilla-La Mancha como es el ajo.
De la Sierra, quien ha puesto en valor “la calidad de lo nuestro”, refiriéndose al prestigio nacional e internacional con el que cuentan muchos productos de nuestra tierra, ha destacado la labor realizada por los productores y los comercializadores de Castilla-La Mancha, “que han situado al ajo morado de Las Pedroñeras en prácticamente todos los mercados del mundo, a pesar de las dificultades”.
Asimismo, el presidente de Globalcaja ha resaltado el papel del sector del ajo en la generación de riqueza, de empleo y de vida, sobre todo, en nuestros pueblos, contribuyendo a la vertebración del territorio. “Es un cultivo social, genera economía, desarrollo y posibilita que las personas decidan vivir en el mundo rural”.
Impulso a la innovación
Por otro lado, De la Sierra ha visitado la Cooperativa San Isidro El Santo, con quien Globalcaja y su Fundación en Cuenca mantienen una excelente relación, y ha tenido la oportunidad de comprobar de primera mano la fuerte apuesta realizada en materia de I+D+i.
Con el objetivo de ofrecer un ajo de la máxima calidad, desde 2013, la cooperativa, con la colaboración de la Fundación Globalcaja Cuenca, está llevando a cabo un proyecto de mejora vegetal a través de un proceso de cultivo de meristemos in vitro, que les permite obtener su propia semilla libre de virus y enfermedades, más productiva y rentable.
El año pasado, también con el apoyo de la Fundación, se dio un paso más con la construcción de un invernadero exclusivamente para la fase de adaptación del material producido en el laboratorio al ambiente exterior.
En este sentido, el presidente de Globalcaja ha querido hacer especial hincapié en la importante repercusión que estas ayudas a la investigación tienen para todos los productores de la zona, “permitiéndoles obtener un ajo de mayor calidad y haciendo de él un producto embajador de Castilla-La Mancha en todo el mundo”.
Tanto De la Sierra como el presidente de la cooperativa, Agustín Ortiz, se han mostrado satisfechos con los logros alcanzados en estos años de colaboración en pro de la modernización e innovación de la industria agroalimentaria.