Un espacio para el esoterismo en la calle Toledo

Esperaba encontrarme con una persona con la típica y tópica vestimenta esotérica pero no; me recibe Ainhoa, una joven vestida con un peto vaquero y una camisa. En la  tienda de la calle Toledo, música de fondo con mantras orientales y olor a varillas de incienso. Algunos cuadros alusivos al tema y una pequeña fuente con agua reciclada sobre el mostrador…

Pequeñas estanterías con productos y objetos alusivos al esoterismo, la relajación, etc. Varillas de incienso de varios tipos, perfumes, jabones, «palo de santo» y objetos diversos.
Le pregunto cómo se le ha ocurrido abrir este pequeño local que inauguró hace unos días.
Su respuesta es que está muy interesada en este mundo – el esotérico – pero también con muchas ganas de que todo esto llegue a muchas partes, a muchas personas.
Nosotros, continúa Ainhoa, nos movemos por energías y necesitamos ayuda de este tipo de productos que si los necesitas puedes conseguirlos por internet, mercadillos medievales o en este tipo de tiendas.


¿Cómo te has atrevido con esto en unos momentos tan complicados?
Pues mercadillos solo hay en algunas ciudades y sólo unos días al año. Yo he querido que estos productos sean accesibles siempre y no solo cuando hay una feria u otro tipo de evento.
Además de vender estos productos ¿qué más ofrecéis?
Hacemos consultas de tarot terapéutico, limpiezas energéticas, etc.
Haciendo de «abogado del diablo», ¿alguna sintonía con rituales o algún tipo de magia extraña?
(Se ríe…) Nada que ver con rituales satánicos ni nada parecido. Solo queremos el bien para las personas y nada más.
Oigo música oriental…
Sí, son mantras. Ayudan a relajarte y crean buenas vibraciones.
Llevas solo unos días, ¿qué tal?
Bueno, todo comienzo es difícil, pero con ilusión.
Gracias Ainhoa.
Gracias a ti.

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