Verónica Ramírez Diniz quiere abanderar el nombre de Ciudad Real en el top de la moda y la belleza. Verónica, de 28 años de edad, representa a la provincia en el certamen Reinado Nacional de Belleza (RNB), en el que compite con otras 52 candidatas que también aspiran a representar a España en los certámenes femeninos anuales más importantes del mundo, como Miss Supranational. La gala final tendrá lugar el sábado, 28 de mayo, en Torrox (Málaga).
Verónica nació y creció en Guadalajara, y los focos y las cámaras no le son ajenos. De hecho lleva ya unos años realizando trabajos como modelo, e incluso ha protagonizado algún anuncio. Tras finalizar el Bachillerato, se formó como azafata y relaciones públicas, y ahora trabaja como recepcionista, compaginando sus trabajos como modelo.
Verónica confiesa que ser Miss siempre fue uno de sus sueños, y aunque no se veía «capaz o válida», ahora esta dispuesta a darlo todo. Su padre, nacido en Sigüenza, y su madre brasileña han sido siempre su gran inspiración. «Mi padre me enseñó que hay que luchar y trabajar hasta el último suspiro. Tenía un talento especial para relacionarse con la gente. Mi madre, con un corazón enorme, es mi pilar fundamental, y me enseña cada día que los sueños hay que perseguirlos; me encanta pasar tiempo con ella», señala.
Esta joven reconoce que viene de una «familia humilde», pero se siente orgullosa de la educación que ha recibido. «Mi familia me ha inculcado que la educación, ser buena persona y el esfuerzo son las claves del éxito; para mí el éxito es ser feliz con lo que hago, y ser Miss en RNB me hace realmente feliz», subraya.
A Verónica le encantan los animales. Tiene dos perros y aprovecha los fines de semana para disfrutar de la naturaleza con ellos. También viaja mucho, ya que le encanta descubrir culturas nuevas, y practica ejercicio. El pole dance es su último descubrimiento.
A su juicio, «los certámenes de belleza están muy mal interpretados y la gente solo ve lo superficial, pero detrás de esto hay mucho esfuerzo y sacrificio, tanto por parte de los concursantes como de la organización que hay detrás», si bien es consciente de que «no todo es un camino de rosas y no todo son palabras de ánimos o apoyo». «Hay gente con muy poca empatía que sólo busca hacer daño y hay que tener la mente muy fuerte y serena para no venirte abajo», reflexiona.
En todo caso Verónica está muy ilusionada ante el viaje a Torrox, donde espera conocer al resto de chicas. «Creo que va a ser una experiencia mágica, al final somos personas que tenemos un mismo propósito y eso une mucho. Aunque seamos competencia, tenemos que ser compañeras primero y ser una piña», concluye.
Puedes ver una versión corta del vídeo oficial de presentación de Verónica en este enlace, y si quieres conocerla más, puedes visitar su perfil en la web del certamen.
