Antonio Carmona.- Supongo que no resulta fácil ser objetivo cuando eres juez y parte de la presentación de un proyecto arqueológico como el que se dio a conocer el sábado, 16 de abril, en Solana del Pino. Aun corriendo ese riesgo, nos atrevemos a asegurar que no sólo cubrió las expectativas, sino que las superó con creces.
Alfonso Caballero Klink rememoró de forma meticulosa la historiografía de todas
aquellas personas que han contribuido al descubrimiento y difusión del patrimonio
rupestre en el término de Solana del Pino, desde hace más de un siglo, aportando
documentación en imágenes y registros oficiales.
Laura María Gómez García no le fue a la zaga con una exposición entretenida y accesible sobre las últimas tecnologías aplicadas en imagen (DStretch) y fotografía en tres dimensiones (fotogrametría) que ayudan a interpretar y hacer aún más atractivo este arte esquemático, que ya de por sí levanta pasiones.
Todo fue posible gracias al apoyo incondicional de la alcaldesa de Solana del Pino, Josefa Poyatos de Marcos, la asistencia de un público entregado y participativo y la generosa colaboración de ANASMA.