El concejal de Seguridad Ciudadana, David Serrano, ha comparecido esta mañana en el salón de plenos del Ayuntamiento de Ciudad Real para presentar la segunda fase del programa “Ciudad Real Cardioprotegida”, que ha permitido instalar 7 nuevos desfibriladores, sumados a los 8 de la primera fase.
Así pues, edificios como el Museo Elisa Cendreros y centros de trabajo municipales, como el cementerio, Servicio de Jardines, Mantenimiento o Limpieza, ahora también contarán con su propio desfibrilador.
En total, sumando los de tipo móvil con los que cuenta el cuerpo de Protección Civil y Policía Local y los instalados en el Patronato de Deportes, la ciudad cuenta actualmente con un total de 28 desfibriladores, que el Ayuntamiento tiene a disposición de la ciudadanía.
La apuesta del Consistorio por esta iniciativa tiene que ver con los datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), los cuales sitúan a la insuficiencia cardíaca como uno de los tipos de fallecimientos más frecuentes. “Existe mayor probabilidad de sufrir un infarto que verte envuelto en un incendio. Sin embargo, en todos los edificios públicos siempre encontramos un extintor”, ha manifestado el edil de Seguridad Ciudadana, quien ha explicado que hasta la fecha este servicio que apuesta por la salud de los ciudadanos ha logrado salvar una vida hasta la fecha. “Para nosotros, ya estaría más amortizada esta inversión”.
Recordar que aquellas concentraciones multitudinarias de personas, tales como la Cabalgata de Reyes, procesiones o el desfile del Domingo de Piñata también cuentan con la protección de un desfibrilador móvil que pueden utilizar los agentes de la Policía Local y los voluntarios de Protección Civil.
El DESA es un equipo que administra una descarga eléctrica a una víctima de un paro cardíaco y permite al personal no médico salvar vidas.
Bien por esta actuación, pero faltan en las oficinas municipales del Mercado, donde hay varios servicios y esta el Registro municipal.