El complejo industrial de Repsol en Puertollano avanza en su proceso de transformación industrial superando los objetivos de eficiencia energética marcados para el ejercicio 2020-2021 en un 14%, según ha informado la compañía en un comunicado.
En línea con el compromiso de Repsol de convertirse en una compañía cero emisiones netas en 2050, el Complejo Industrial de Puertollano ha conseguido una reducción de 60.680 toneladas de CO2 en dicho periodo frente a las 53.000 toneladas de CO2 al año, previstas inicialmente, asegura.
Esta reducción, que supone la cantidad equivalente de CO2 que absorbería un bosque con una superficie similar a 12.500 campos de fútbol, es el resultado de una importante inversión, cercana a los 20 millones de euros. Las inversiones se han centrado en tres ámbitos: la eficiencia energética, nuevas tecnologías y digitalización.
En este sentido, la empresa explica que la ejecución del proyecto de electrificación del cracker de Olefinas ha sido uno de los más destacados en 2021. En el mes de mayo finalizaba este proyecto cuyo hito principal fue la sustitución de una de las grandes turbinas de vapor que accionan la unidad por un motor eléctrico. «Esto ha supuesto una apuesta decidida de Repsol por el desarrollo y uso de las tecnologías más innovadoras para incrementar la competitividad del Complejo Industrial además de alcanzar el objetivo de reducción de emisiones de CO2 en sus procesos industriales», subraya.
Más enfocada al campo del ahorro energético ha sido la inversión realizada para la instalación de un sistema de combustión más eficiente de uno de los hornos del área de Destilación. Además, se han llevado a cabo diferentes proyectos con el fin de incrementar la eficiencia de las redes de distribución del complejo (mejora del calorifugado, simplificación de colectores y reducción de purgadores, etc.)
Durante los años 2020 y 2021 se ha llegado a ejecutar una inversión cercana al millón de euros, cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), con cargo al Fondo Nacional de Eficiencia Energética. «Estos proyectos han permitido una reducción significativa de las emisiones de CO2 así como una racionalización de los consumos de combustible y de vapor en el Complejo Industrial de Puertollano», señala Repsol.
En cuanto a las iniciativas de digitalización encaminadas a mejorar la eficiencia energética, destacan algunas herramientas que permiten realizar predicciones de ensuciamiento en las redes de intercambiadores de calor para prever tareas de mantenimiento. Otra de las aplicaciones sirve para optimizar el caudal de las redes de energía de las distintas unidades.
Objetivos 2022
A juicio de la compañía, «la reducción de emisiones de CO2 así como optimizar los consumos energéticos del Complejo Industrial de Repsol en Puertollano son acciones fundamentales para incrementar la eficiencia energética de las instalaciones».
«Cada año los objetivos son más ambiciosos y de cara a 2022, el Complejo Industrial de Repsol en Puertollano se marca como objetivo una reducción de cerca de 47.000 toneladas de CO2 o lo que es lo mismo, la absorción de CO2 de un bosque con una superficie de casi 10.000 campos de fútbol», recalca. Para alcanzar este horizonte la inversión estimada se acerca a los 14,5 millones de euros para proyectos de inversión y diferentes iniciativas de eficiencia energética.
«Todo esto», prosigue, «apoyándose en la digitalización y en un proceso continuo de búsqueda de oportunidades en los ámbitos de las tecnologías, diseño y procedimientos de operación y mantenimiento con el fin de transformar el Complejo Industrial de Repsol en Puertollano en un hub multienergético capaz de generar productos de baja, nula e incluso negativa huella de carbono».
Estos objetivos están alineados con la estrategia de Repsol de convertirse en una compañía cero emisiones netas en 2050, recogida en su Plan Estratégico 2021-2025 y que desde el pasado mes de octubre, se han actualizado con hitos «aún más ambiciosos y retadores».
Así, la nueva senda de descarbonización para alcanzar la neutralidad en 2050 establece una reducción las emisiones de CO2 en el conjunto global de la compañía del 15% en 2025, del 28% en 2030 y del 55% en 2040, frente a los anteriores del 12%, 25% y 50%, respectivamente.