La líder de Ciudadanos en Castilla-La Mancha, Carmen Picazo, ha reivindicado el papel del partido de centro como «puente para hacer posibles los grandes consensos que España necesita para seguir avanzando económicamente y en derechos sociales». En este sentido ha mostrado su preocupación por la deriva «extremista» del PP, que en Castilla y León «ha sustituido a un socio de gobierno serio, sensato, leal y estable como Ciudadanos por un partido populista e imprevisible como Vox».
Picazo ha señalado que «la polarización que vive la política española hace imposibles los grandes acuerdos de Estado y contribuye a generar un clima de división en la sociedad». A este respecto ha dicho que «yo no quiero dejar en herencia a mis hijos un país partido en dos mitades irreconciliables, sino un país unido» y ha recordado que «cuando el centro ha sido fuerte, a España le ha ido mejor, mientras que cuando la fuerza la han tenido los extremos hemos salido perdiendo todos. Lo hemos visto con Podemos y me temo que lo veremos con Vox». Por ello ha pedido al PP y PSOE que «hagan una reflexión profunda más allá de los resultados electorales».
La dirigente liberal, no obstante, no ha eludido la autocrítica, indicando que «no hemos obtenido un buen resultado y hay que reconocerlo. Probablemente no hemos sabido trasladar a la opinión pública el trabajo de Ciudadanos en Castilla y León». En todo caso, ha reconocido que «en este clima de polarización es lógico que el partido de centro sufra más», remarcando que «aun así hemos logrado resistir y mi compañero Paco Igea seguirá representando el liberalismo en su región, lo cual es una buena noticia».
«Oportunidades para nuestros jóvenes»
En una entrevista concedida este martes a la cadena Cope, Picazo ha criticado, por otra parte, el «conformismo» de los viejos partidos, «que piensan más en sus cálculos electorales que en intentar abordar los problemas reales de las familias y los autónomos de la región». Así, ha arremetido de manera especialmente contundente contra «el régimen socialista» que, a juicio de la dirigente liberal, se caracteriza por «las promesas incumplidas y el maltrato a los autónomos y las pymes, a los que machaca a impuestos obstaculizando la creación de puestos de trabajo».
La líder naranja ha recordado que Castilla-La Mancha es la tercera comunidad de España con mayor tasa de fracaso escolar y abandono temprano y que, además, «existen evidentes carencias en el sistema sanitario, en materia de financiación o en políticas de conciliación familiar y fomento de la natalidad». Por ello ha puesto el foco en «la utilidad de la política más allá de los intereses partidistas» y ha reclamado más oportunidades para la clase media, especialmente para los jóvenes, «para que no se tengan que marchar fuera de Castilla-La Mancha a emprender un proyecto de vida, como ahora lamentablemente sucede en muchos casos».
