La Universidad de Castilla-La Mancha, la Junta de Comunidades y la Fundación Globalcaja HXXII han dado a conocer esta mañana el Informe GEM (Global Entrepreneurship Monitor) Castilla-La Mancha en el Campus de Ciudad Real.
En el acto han estado presentes el rector, José Julián Garde; la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco; el presidente de la fundación, Rafael Torres; y el director del informe Juan José Jiménez; además de los vicerrectores e integrante del equipo investigador, Ángela González y Francisco Sáez; la directora general de la fundación, Carla Avilés; representantes de diferentes administraciones, facultades de la universidad y medios de comunicación. Se trata del noveno año consecutivo en el que se lleva a cabo este informe único en Castilla-La Mancha.
Juan José Jiménez presentó el estudio, que cumple su noveno año consecutivo y cuyos resultados ponen de manifiesto que el anterior fue un año de inflexión para el emprendimiento en la región, con una bajada en la gran mayoría de los indicadores, pero en línea con lo ocurrido a nivel nacional como consecuencia del impacto que ha tenido la COVID-19 en la economía. El informe deja ver que hasta la fecha la tendencia al alza de la actividad emprendedora en la región era lenta pero sostenida, y advierte de que habrá que esperar al siguiente estudio para comprobar si el pasado fue un año de transición y se recupera la senda progresiva de ejercicios anteriores.
“No es fácil pero merece la pena arriesgarse”
Tras la presentación del informe, el presidente de la Fundación Globalcaja intervino para destacar la importancia de la colaboración entre las entidades públicas y privadas para ayudar desde el conocimiento a la toma de decisiones, tanto a las instituciones, administraciones y cualquier agente implicado en el emprendimiento, como a los propios empresarios y emprendedores. Torres subrayó que “la cultura empresarial y emprendedora tiene una gran importancia entre nosotros, el empresario es primordial para crear riqueza. Un país con un tejido empresarial fuerte siempre progresa”. En opinión de Rafael Torres, “España debe empezar a aprender a valorar a sus emprendedores, hayan tenido éxito o no” e incidió en la necesidad de reconocer también el fracaso de una iniciativa empresarial por la experiencia que aporta, como parte de un esfuerzo creativo y un compromiso al límite, y porque “la aventura siempre habrá merecido la pena”. “El temor hay que superarlo porque en una empresa de nueva creación existen el éxito y el fracaso, pero proporcionará satisfacciones difíciles de encontrar en otros ámbitos: crear una empresa y puestos de trabajo”, afirmó, concluyendo que en Castilla-La Mancha tenemos una excelente formación gracias a su universidad, un gobierno que da estabilidad y entidades financieras dispuestas, “lo tenemos todo, solo falta perder ese miedo”.
Patricia Franco, por su parte, afirmó que los indicadores del Informe GEM coinciden con los que maneja la Consejería de Economía, Empresas y Empleo. Sobre uno de los aspectos destacados para el emprendimiento, como es la financiación, explicó que en Financia Adelante el Gobierno regional ha dedicado préstamos por valor de 19 millones que han permitido que empresarios, emprendedores hagan inversiones por valor de 87 millones. Con ese programa, añadió, se crean o mantienen 2.200 puestos de trabajo en Castilla-La Mancha. En cuanto a la Estrategia de impulso al trabajo autónomo, informó de que está dotada con 75 millones para los próximos años. Sobre el informe, destacó la labor de la universidad y de fundaciones como Globalcaja HXXII en la creación y el apoyo a las empresas. Además de la financiación, recordó, en este periodo se ha agilizado la creación de empresas y se reduce la burocracia, potenciando el acompañamiento con el sistema de emprendimiento y la red de apoyo al emprendedor. La estrategia, reflexionó Franco, es “un documento abierto” y “el informe servirá porque lo consideramos esencial”.
La consejera se detuvo en 3 aspectos con capacidad de mejora” y que habrá que ver en el próximo cómo evolucionan, igual que analizar cómo el Covid ha afectado a la cultura emprendedora y de qué forma abordamos la recuperación”: el espíritu competitivo de la región en materia de emprendimiento, por encima de la media nacional; perfil del emprendedor, para reducir la edad en la que se emprende; y la capacidad de creación de empleo, también por encima de la media nacional pese a ser todavía bajo.
Cerró el turno de intervenciones José Julián Garde, recordando que la presentación anterior fue su primer acto como rector. Para el máximo responsable de la UCLM, el Informe GEM Castilla-La Mancha supone dar un ejemplo de colaboración público-privada estable en el tiempo, que va a continuar en próximas ediciones. Para Garde, “las universidades modernas tenemos una responsabilidad con incentivar el emprendimiento. Tenemos que seguir incidiendo en esta política de estímulo del empleo entre estudiantes y egresados”. El rector quiso agradecer y reconocer el esfuerzo del equipo investigador “con perspectiva y prospectiva”.
Qué es el Informe GEM
El proyecto GEM (Global Entrepreneurship Monitor) nació en el año 1997 como una iniciativa de la London Business School y del Babson College para crear una red internacional de investigación en el entorno de la Creac ión de Empresas. Una de sus aportaciones más destacadas es el informe global anual, en el que se proporcionan los indicadores de actividad emprendedora, así como un diagnóstico general de las condiciones para emprender, entre otras muchas informaciones.
El Informe GEM presenta los indicadores básicos de la actividad emprendedora en la región, y se sirve de dos encuestas como fuente de información: una llevada a cabo entre la población de 18 a 64 años y otra por expertos en diferentes áreas, para describir valores, percepciones y actitudes de la sociedad ante el emprendimiento; el entorno de emprendimiento visto por un panel de expertos; analizar el proceso emprendedor y la dinámica empresarial y ofrecer una descripción de las iniciativas en función del tiempo de vida y estado de creación, así como el perfil tipo del emprendedor. Estos datos se completan con información obtenida por otras fuentes secundarias.
El resultado es el indicador definido como Tasa de Actividad Emprendedora (TEA), desagregado en cuatro componentes: emprendimiento potencial, emprendimiento naciente, nuevo emprendimiento y empresa consolidada.
En esta edición, el informe recoge el descenso de la Tasa de Actividad Emprendedora (TEA) en un 1,3%, lo que la sitúa en un 4,8%. En cuanto a la intención de emprender en los próximos 3 años, se sitúa en el 6,8%, cerca del 7% nacional.
Este informe se marca como objetivo principal el analizar qué actitudes, valores y percepciones de la población de Castilla‐La Mancha condicionan el comportamiento emprendedor, para obtener la TEA (total, por tramos de edad y por género, por motivación, por sector, por actividad, por etapa, etc.) y conocer cuál es la opinión de los expertos respecto a las condiciones para el emprendimiento en la región.
¿Cómo es el emprendedor castellano-manchego?
El emprendedor en nuestra región sigue siendo con mayor frecuencia un varón, de entre 35 y 44 años, que cuenta con estudios de Educación Secundaria o Educación Superior, creciendo la proporción de formación superior, emprende con fondos propios o familiares y pertenece a segmentos de renta alta. Sus motivaciones son, de forma mayoritaria, crear empleo por ganarse la vida, seguidas por generar riqueza, continuar una tradición familiar y marcar una diferencia en el mundo.
En la mayoría de los casos, se trata de empresas de 1 a 5 empleados, en empresas con mayor grado de innovación que en el estudio anterior, y de baja intensidad tecnológica. Destaca el porcentaje de empresas en fase emprendedora que han creado empleo en la región: un 16,8%, frente al 14,4% de España.
Por sectores, el de mayor actividad es el de servicios orientados al consumo (45,3%, un 5,6 % menos que en el anterior estudio), seguido del sector transformador (23,4%), el de servicios a empresas (23,1%), y el extractivo (8,2%).
En cuanto a la percepción de los expertos lo mejor puntuado son las infraestructuras físicas; las peor valoradas son la educación escolar, pese a estar por encima de la media nacional, la política fiscal, la burocracia y la financiación.
El estudio empieza a mostrar que el miedo al fracaso y el escaso espíritu competitivo son dos de los limitantes a destacar en el proceso de creación de empresas para la población de Castilla-La Mancha.
El informe completo está a disposición de todos los interesado y puede descargarse en la página web de la UCLM (www.uclm.es) y la Fundación Globalcaja HXXII (www.fundacionglobalcajahxxii.com )