El concejal de Deportes, Antonio Gallego, y la concejala de Igualdad del Ayuntamiento de Ciudad Real, Ana Belén Chacón, han acompañado a los jóvenes participantes del programa ERASMUS+ “Fostering tolerance and respect against violence and bullying” en una actividad deportiva en las instalaciones del colegio Salesiano Hermano Gárate.
Gallego explicaba que este encuentro sirve para trabajar “las herramientas sociales de convivencia y que no existan diferencias, en un espacio deportivo que sirve para igualar a todos y a todas”. Añadía el edil que desde el equipo de gobierno “se trabaja siempre la igualdad de una forma transversal entre las distintas concejalías”. Los jóvenes procedentes de diferentes países explicaban el enriquecimiento que supone realizar esta actividad, no solo para conocer la cultura de otros países, sino para analizar en profundidad el problema de la violencia y el acoso en centros educativos. Se trata de una actividad que está llevando a cabo el colegio Salesiano Hermano Gárate de la capital, en concreto el departamento de lenguas extranjeras. Erasmus + consiste en una alianza de cinco países de la Unión Europea (Polonia, Macedonia del Norte, Rumanía, Turquía y España) con el objetivo de poner en común diferentes realidades que se viven en los colegios para fomentar la tolerancia y el respeto rechazando cualquier manera de violencia o acoso en el ámbito escolar.
Este proyecto comenzó su andadura en 2020 con un grupo de 24 alumnos y alumnas de 4º de la ESO, pero tuvo que ser interrumpido por motivo de la pandemia. Los alumnos que ahora se encuentran en segundo de bachillerato ya han visitado Turquía (febrero 2020) y Macedonia del Norte (octubre 2021), quedan por desarrollar las movilidades de Polonia y Rumanía. Entre los días 13 y 19 de diciembre se ha acogido en Ciudad Real a 40 personas, entre alumnos y profesores, a los que se les está enseñando la ciudad, entre otras cosas el Ayuntamiento de Ciudad Real, donde han sido recibidos de manera oficial en el salón de plenos por la alcaldesa.
La coordinadora del proyecto, Ángeles Sánchez, explicaba que se trata “de fomentar la tolerancia y el respeto entre los alumnos, ya que no es algo exclusivo de España, sino que se repite en otros lugares con los mismos patrones. Por ello, intentamos que nuestros estudiantes sean más abiertos y tolerantes”.