Tras 36 años y cuatro meses de servicio en el cuerpo de la Policía Local de Argamasilla de Calatrava, el Ayuntamiento de la localidad ha querido reconocer en su jubilación tan dilatada y entregada labor en el cuerpo a Alfonso Serrano Racionero.
‘En agradecimiento a su excelente trato y por el esfuerzo y trabajos prestados en pro de esta Administración’, como así reza en la placa que ayer recibía quien también ha ejercido como representante de los trabajadores municipales en las mesas de negociación.
Palabras que le ratificaba la alcaldesa Jacinta Monroy, en un sencillo acto celebrado en el salón plenario consistorial, en presencia del concejal José Antonio García Serrano, el jefe incidental de cuerpo, Joaquín Castellanos, otros agentes policiales y la familia de Alfonso.
“En nombre de toda nuestra Corporación y en nombre de todo el pueblo, gracias por todo tu buen hacer, en los buenos momentos y en otros de dificultades como lo fueron en su día las inundaciones y otros tan singulares que hemos vivido”, refería la regidora.
Monroy también tuvo palabras de gratitud a la esposa e hija, “porque trabajar a turnos es algo muy complicado, además de tener que hacerlo en fiestas, navidades y tantos otros momentos, además de tantos cambios horarios a como obligan los turnos”, añadía.
García Serrano, como interlocutor que ha sido tanto en las negociaciones laborales como en su responsabilidad política para el cuerpo policial, también le reconocía su trabajo en épocas más difíciles, como la reciente pandemia y previas situaciones de crisis económica.
Y pese a todas las circunstancias “te agradezco que siempre has dado pie al diálogo, al respeto y al hecho de querer ponernos de acuerdo y eso hoy en día es muy de valorar y, sobre todo, desde nuestra posición.
Alfonso Serrano reconocía la necesidad de buscar consensos en las relaciones entre Concejalía de Personal y la representación del funcionariado “porque si una de las partes se cierra nunca llegaríamos a ningún acuerdo y eso no es bueno para ninguna parte”.
Y Joaquín Castellanos, compañero en los servicios policiales y en la representación de los funcionarios, le reconocía también tan destacable trayectoria, rememorando aquella generación de jóvenes que llegaron prácticamente a la vez a la Policía Local.
“Nos sentimos un poco viudos desde que os habéis jubilado varios compañeros, porque han sido muchos años compartidos, muchas vivencias, muchas negociaciones también compartidas”, refirió a quien ingresaba en el cuerpo el 1 de enero de 1985.
Por aquel entonces, la plantilla la integraban tres personas y prácticamente era aprobar la oposición y empezar a desarrollar la labor policial, por cuanto en aquellas épocas no había academia en la que desarrollar fase posterior de formación.