La delegada de la Junta de Comunidades, Carmen Teresa Olmedo, ha expresado hoy en Alcázar de San Juan el agradecimiento del Gobierno de Castilla-La Mancha a las asociaciones de folklore de la región por preservar las tradiciones y el patrimonio cultural inmaterial de nuestra región.
Olmedo, que ha clausurado las XXIII Jornadas Regionales de Folklore, que han reunido este fin de semana a 450 personas de 50 grupos folklóricos de toda Castilla-La Mancha, ha subrayado que la labor que llevan a cabo las asociaciones de folklore que pueblan nuestra comunidad autónoma es “impagable” porque, de no ser por ellas, muchas canciones y danzas tradicionales es posible que se dieran por perdidas.
La representante del Ejecutivo regional en la provincia ha señalado que el interés de los poderes públicos por la protección y salvaguarda de esta manifestación del patrimonio inmaterial es un hecho relativamente nuevo, que en nuestro caso tiene mucho que ver con la creación de la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha y de la necesidad percibida por el Gobierno que hoy preside Emiliano García-Page de la fragilidad de estas manifestaciones de la diversidad cultural y de la creatividad permanente de la sociedad.
En este sentido, Olmedo ha recordado que La Ley de Patrimonio Cultural de Castilla-La Mancha, cuya última actualización data de 2017, transpone a nuestra región el concepto de patrimonio inmaterial en el sentido establecido por la Unesco, según la cual, este legado cultural “proporciona a las comunidades un sentimiento de identidad y de continuidad, favorece la creatividad y el bienestar social, contribuye a la gestión del entorno natural y social y genera ingresos económicos”.
En Castilla-La Mancha este legado se plasma en muchas manifestaciones religiosas, culturales y festivas, de las que las más representativas han sido declaradas Bien de Interés Cultural por el Gobierno de Castilla-La Mancha, y, como ha destacado la delegada, entre ellas se encuentra la más característica de nuestro folklore, la Seguidilla Manchega, “seña de identidad y muestra fundamental de la tradición en nuestros pueblos”.
Este mes se cumplen precisamente seis años desde que el Ejecutivo regional declarara Bien de Interés Cultural la seguidilla. Coincidiendo con este aniversario y con la celebración de las jornadas se ha incluido junto a las actuaciones, visitas guiadas y talleres la presentación de un libro sobre esta música y baile populares del que son autores José Raúl Muela y José Manuel Fernández Cano, estudio que “ayudará a dar una mayor difusión y conocimiento de un ritmo y unos bailes que son uno de nuestros símbolos que nos identifica en el mundo”.
En el acto de clausura, Olmedo ha resaltado el apoyo del Ejecutivo de Emiliano García-Page al folclore con la declaración de la Seguidilla como Bien de Interés Cultural y la financiación del estudio de la jota manchega para reforzar la candidatura de esta disciplina artística a Patrimonio de la Humanidad Inmaterial por la UNESCO.
Por último, la delegada de la Junta ha tenido palabras de reconocimiento para los premiados con las insignias de Oro, Victoriano Domínguez Criado, de Urda (Toledo), la fiesta de la Endiablada, de Almonacid del Marquesado (Cuenca) y el anterior presidente de la Federación castellano manchega de asociaciones de Folclore, Jesús Francisco Moreno Serna.
