Esta tarde se llevaba a cabo en las instalaciones del polideportivo Puerta de Santa María, el taller de tiro que con arco organizado por AMUMA (Asociación de Cáncer de Mama y Ginecológico de Castilla-La Mancha) con la colaboración desinteresada del Club de Arqueros de Don Gil.
La práctica de este deporte resulta beneficiosa para una de las principales secuelas del cáncer de mama como es el linfedema, ya que permite la contracción y relajación de los grupos musculares implicados durante su práctica y favorece la circulación linfática, siendo beneficioso tanto a modo de prevención, como a modo de tratamiento para los brazos afectados.
El taller que ha tenido una duración de dos horas se ha podido llevar a cabo gracias a la implicación directa de la Concejalía de Igualdad y la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento de Ciudad Real, que ha cedido las instalaciones deportivas.
La alcaldesa de Ciudad Real, Eva María Masías, que ha estado acompañada de la concejala de Igualdad, Ana Belén Chacón y miembros de la Corporación Municipal explicaba que es un taller muy participativo y que se ha visto según las estadísticas “que es muy beneficioso para todas aquellas mujeres que sufren esta enfermedad. Desde el Ayuntamiento estamos para ayudarlas y hacerles la vida un poco más fácil, porque son valientes y muy luchadoras, pero también necesitan ciertas facilidades para convertirse en mujeres poderosísimas”. La presidenta de AMUMA Ciudad Real, Sonia Marchán, explicaba que es una actividad que se tenía prevista desde hace tiempo, sin embargo se tuvo que aplazar por culpa de la pandemia. Este taller, de tiro con arco adaptado para mujeres intervenidas de cáncer de mama, tiene grandes beneficios según algunos estudios “con las vibraciones que se producen, una vez que sale la flecha sobre el brazo afectado”, además es necesaria una gran concentración y calentamiento previo. Desde AMUMA se valora la posibilidad de repetir la actividad, debido a la gran acogida que ha tenido. La Asociación organiza, a lo largo del año, diferentes actividades como yoga, método Pilates o cursos específicos de manualidades, adaptados todos ellos a personas intervenidas por las peculiaridades que suelen presentar.
