La delegada de la Junta de Comunidades en Ciudad Real, Carmen Teresa Olmedo, ha comunicado al alcalde de Chillón, Jerónimo Mansilla, que el Gobierno de Castilla-La Mancha tiene previsto acometer el año que viene las obras de refuerzo del firme del tramo de la carretera CM-4200 que va desde la localidad hasta el límite de provincia con Badajoz.
La CM-4200 va desde Almadén hasta el límite provincial, a partir del cual la carretera recibe la denominación EX-323. El tramo entre Chillón y la frontera provincial y regional tiene una longitud de nueve kilómetros y una intensidad media diaria de 677 vehículos, un 10,3% de ellos pesados. En la actualidad presenta un firme en mal estado, ya que no se ha realizado ninguna actuación de mejora en los últimos 30 años.
En tal sentido, Olmedo señaló que en el Proyecto de Presupuestos de la Junta de Comunidades de Castilla la Mancha para 2022 se ha incluido una partida que permitirá licitar e iniciar la obra a lo largo del año. Esta actuación, que tiene un coste estimado de un millón de euros, mejorará la seguridad del tramo y redundará en la mejora de las comunicaciones entre los municipios de las provincias de Ciudad Real y Badajoz porque, como ha recordado, “para el presidente García-Page no hay ciudadanos de primera y de segunda y los de las zonas rurales tienen derecho a disfrutar de buenas carreteras”.
Según explicó el delegado de la Consejería de Fomento, Casto Sánchez, la obra consistirá en el fresado del deteriorado firme actual para sustituirlo por dos nuevas capas de rodadura, con la consiguiente renovación de la señalización vertical y horizontal, y la limpieza de cunetas. El proyecto incorporará, además, una actuación de mejora de los dos kilómetros de la travesía de Chillón.
El viaje de la representante del Gobierno de Castilla-La Mancha a Chillón incluyó también una visita al taller de empleo “Desarrollo Ambiental Sostenible” concedido por la Consejería de Economía, Empresas y Empleo al Ayuntamiento que está formando a ocho personas en situación de desempleo mayores de 45 años como podadores y restauradores arbóreos y como usuarios cualificados de productos fitosanitarios.
Además del contrato de formación de los alumnos, que durante sus seis meses de formación perciben el Salario Mínimo Interprofesional, los 96.000 euros del presupuesto de este taller de empleo incluyen el coste de las dos personas contratadas para formarlos y para la gestión administrativa del taller.
Acompañada por el alcalde y dos de sus concejalas, Olmedo conversó con los alumnos del taller y les animó a no dejar pasar esta oportunidad de mejorar su capacidad para acceder al empleo en una especialidad como los trabajos de poda que tienen una alta demanda en la actualidad, tanto desde las administraciones públicas como desde el sector privado.
A este respecto, la delegada se refirió también a las posibilidades que ofrece el autoempleo autónomo o la constitución de sociedades cooperativas por parte de los beneficiarios de estos talleres, una posibilidad de salida profesional para la que contarían con las diferentes ayudas que ofrece el Gobierno de Castilla-La Mancha.