El concejal de urbanismo y servicios municipales Román Romero, junto al director de Aquona en Socuéllamos, Ángel Fernández, han presentado oficialmente el nuevo vehículo de saneamiento, con el que se mejorará la gestión y el rendimiento de los 56 kilómetros de la red de alcantarillado de Socuéllamos.
Con la adquisición de este nuevo vehículo, un camión con sistema de impulsión- succión que cuenta con la más avanzada tecnología, se produce un salto cualitativo y cuantitativo en la planificación de la limpieza anual de la red de saneamiento de Socuéllamos, lo que se traduce en un mayor aprovechamiento de los 56 kilómetros de la red de alcantarillado, de las 2.500 acometidas de saneamiento, los 750 pozos de registro y los más de 2.400 imbornales que forman la red de saneamiento de la ciudad.
El nuevo camión cuenta con una mayor potencia de succión e impulsión, capaz de solucionar hasta los atascos más complicados, permitiendo realizar trabajos de desatascos y limpiezas incluso a varios metros de distancia. Todas estas mejoras se traducen en la contribución a los Objetivos de Desarrollo Sostenible favoreciendo un menor impacto medioambiental, ya que el propio vehículo permite el traslado de las aguas residuales hasta la planta de tratamiento de aguas residuales.
Las mejoras derivadas del nuevo vehículo se traducen en la optimización del servicio gracias a un mejor control a la hora de realizar el mantenimiento, tanto preventivo como correctivo, de la red de colectores. Hasta la fecha, solo era posible realizar la limpieza correctiva de la red, por lo que ahora, además, se va a planificar una limpieza preventiva y de puntos críticos.
Con la planificación anual de la red, se garantiza, entre otras mejoras, que todas las instalaciones, equipos y servicios tengan un funcionamiento óptimo, así como evitar el envejecimiento prematuro de los equipos. Otra de las ventajas derivadas de la adquisición del nuevo vehículo se traduce en evitar las infiltraciones y fugas en la evacuación de las aguas residuales hasta las instalaciones de tratamiento y, por tanto, la prevención de daños innecesarios a propiedades, tanto públicas como privadas.