Luis Mario Sobrino Simal.- Con unos jardines del Prado llenos de puestos de venta, juegos, numerosos dibujos colgados en expositores y de gente de todas las edades, pero sobre todo jóvenes, que recordaban tiempos pre pandémicos, se inauguraba en el templete de los jardines esta nueva edición, octava en su historia.
El acto lo presentó Ángel Serrano de Serendipia y estuvo acompañado en la mesa por la protagonista de este año, la artista Ana Miralles entre otras personas como la Teniente de alcalde Pilar Zamora Bastante y la directora de Globalcaja, Marta Crespo Ramos.
En el acto inaugural estuvieron representantes tanto del gobierno municipal como de la oposición.
Antes de dar paso a las invitadas, Angel solicitó un primer aplauso a la memoria de todas las personas que fallecieron por el Covid y a todo el personal, en distintos campos profesionales que se entregó y se sigue entregando a los cuidados de todas las personas que aún sufren esta lacra.
El III premio de esta edición fue otorgado por sus numerosos méritos y actividad cultural a Ana, que representa a todo un mundo de artistas gráficos en todo el país, con una trayectoria plena de eventos y premios. Comenzó profesionalmente hablando en 1982 en la revista “Rambla” y de ahí una sucesión de trabajos con Madriz, Cairo o Vogue España entre otras muchas publicación. A Ana podemos leerla en libros infantiles y juveniles, en álbumes en colaboración con otros ilustradores e ilustradoras, en publicidad, folletos, carteles, y un sinfín de materiales gráficos diversos y sin olvidar su faceta como diseñadora de fondos de escena y vestuarios teatrales y cinematográficos.
Ana trabaja actualmente en su nuevo proyecto junto al guionista Emilio Ruiz y que espera ver la luz el año que viene. Cientos de personas han “rastreado” todos y cada uno de los puestos – más de 20 jaimas instaladas por 15 tiendas con exhibición de todo tipo de material: libros, revistas, objetos diversos, mesas con actividades y juegos… Y todo ello “vigilado” por personajes del comic que deambulaban y charlaban con el público, la Legión 501, por una causa solidaria.
