Castilla-La Mancha ya cuenta con un ambicioso Plan de Depuración del Agua con el horizonte 2032 para cumplir con la economía circular, “uno de nuestros objetivos principales en la labor de Gobierno”. Serán cerca de 600 millones de euros de inversión y 629 estaciones depuradoras de aguas residuales urbanas.
El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, así lo ha señalado en los prolegómenos de la quinta reunión de la Mesa del Agua, que hoy se ha celebrado en la Fábrica de Harinas de Albacete, de manera presencial.
Un foro de participación consolidado, a pesar de la pandemia, para el progreso y la recuperación de Castilla-La Mancha y que ha contado con la asistencia de los representantes de agentes sociales, económicos y partidos políticos de la región.
Según ha destacado el consejero, hay dos hitos importantes dentro de este plan. Por un lado, los 65,5 millones de euros que ya se están invirtiendo de 2021 a 2023, para la realización de 18 depuradoras de la región, algo que se ha conseguido, “con el esfuerzo de todos”, ha afirmado.
Además, el segundo hito, ha explicado, es que de cara a 2026 “se habrán finalizado en Castilla-La Mancha todas las actuaciones necesarias para adecuar nuestra depuración a los objetivos que marca la directiva de tratamiento de aguas residuales a nivel europeo”. Algo, ha subrayado Martínez Arroyo, que es “necesario y urgente”.
El consejero ha destacado que este Plan de Depuración es la mayor inversión de obra pública de la historia de Castilla-La Mancha en esta materia.
En cuanto a otras cuestiones, en la jornada de hoy se ha avanzado en otros asuntos dentro de la Mesa del Agua, avanzando así en el punto de partida de enero de 2020, primera reunión que se realizó y que desembocó en la firma del acuerdo regional en materia de agua a finales de ese mismo año, en la defensa de los intereses de los castellanomanchegos en esta materia.
Una posición “definida”, en palabras de Martínez Arroyo, y que estará presente “gobierne quien gobierne”. Un compromiso que obliga, “sin ambages” a esta defensa por parte de todos los firmantes, ha asegurado.
El agua como derecho humano y bien público
También hoy se ha tratado el Anteproyecto de la Ley de Aguas de Castilla-La Mancha, una normativa que llegará a las Cortes previsiblemente antes de que finalice el año y con la que se pretende fomentar y garantizar la economía circular del agua. Un texto, ha dicho el consejero, que considera, por primera vez en la historia, el agua como derecho humano y bien público y para el cual espera recabar “la unanimidad de los grupos políticos”.
En relación a otros asuntos del encuentro que se mantiene esta mañana en la Fábrica de Harinas de Albacete figuran la puesta en marcha de la Tubería a la Llanura Manchega, que en su ramal nororiental estaría en marcha en la primavera del año que viene y, para el cual, ya hay acuerdo con los 15 municipios a los que prestaría servicio. También se ha abordado el abastecimiento en los pequeños municipios, donde el consejero ha recordado los 40 millones de euros conseguidos para los municipios ribereños y cuyas obras se han empezado a ejecutar y van a ayudar al desarrollo del territorio rural o la modernización de riegos.
Entre otros aspectos, también se ha abordado los planes de cuenca, donde la Consejería trabaja en las alegaciones con el conjunto del sector, manteniéndose distintas reuniones al respecto. En muchos casos, las alegaciones se presentarán de forma conjunta con los regantes en cuencas como Tajo, Júcar o Segura, para principalmente garantizar las reservas de agua suficientes, aunque, ha recordado el consejero, hay muchos aspectos que ya se ha conseguido garantizar como la modernización de regadíos en el Júcar o los regadíos en el Alberche.