Jesús Millán Muñoz.- Es el museo provincial más antiguo de España e incluye colecciones de etnología, arqueología y bellas artes está ubicado actualmente en el Palacio del Infantado en Guadalajara.
Desde el Museion, Musaeum o Museo de Alejandría, fue un espacio-lugar dedicado a las musas, para que la literatura-poetas, escritores, científicos y filósofos de la antigüedad se dedicarán a la investigación de las letras y de las ciencias. Parece ser que junto a la Biblioteca de Alejandría donde se recogía toda la producción bibliográfica de su época, fueron los dos polos, interrelacionados, que elevaron el saber antiguo a la categoría máxima.
Se dice, que la Biblioteca, tuvo gran influencia el concepto de Liceo fundado por Aristóteles, patrocinada por la monarquía ptolemaica, para la expansión de la cultura griega.
Antecedentes.
Desde la antigüedad, la humanidad ha ido recogiendo parte del material cultural que ha ido produciendo y conservando, sea en templos religiosos o sea en instituciones o entidades culturales, dependientes del palacio, hayan tenido mayor o menor autonomía propia, diríamos que el ser humano ha ido conservando, todo el material documental que ha podido, según circunstancias y épocas, según territorios y sociedades y culturas e ideologías. Siempre se sitúa la biblioteca y museo de Alejandría como el paradigma del mundo antiguo, pero en menor medida de complejidad-amplitud-extensión, en dicha época, se extendieron bibliotecas por todo el Mediterráneo, especialmente desde el mundo helenístico y romano.
Podríamos indicar, que después del paréntesis, pérdida o quema de bibliotecas y gran parte del saber en la Edad Media, conservado en parte, en las bibliotecas de los monasterios, pero también, en el mundo bizantino, cuestión que raramente se estudia y analiza y pondera, llegamos al famoso Renacimiento, que por una vez una palabra o término o vocablo, si intenta representar lo que desea expresar, debido a multitud de causas y razones, una burguesía incipiente que ya venía desde el siglo trece, especialmente después de la gran peste negra, el humanismo del siglo quince y dieciséis, las primeras grandes naciones-Estado en Europa, la recolección o recogida material antiguo encontrado en Roma especialmente, y diversos aconteceres y pareceres, resurgieron la idea de Museo y, de alguna manera, también de renacimiento cultural.
Hasta diríamos en esta última época, estos dos últimos siglos, con otra gran influencia desde el siglo dieciocho del conjunto de conceptos, que denominamos ilustración o revolución filosófica de la Ilustración, fenómeno paralelo, como en una sinfonía, que se encabalgaron, diversas revoluciones: la religiosa luterana y la contrarreforma, la científica de Copérnico, Galileo, Newton, la económica o la revolución industrial, las revoluciones políticas del parlamentarismo inglés, la independencia americana, la revolución francesa, etc., crearon el caldo dc cultivo, del concepto pueblo y del concepto pueblo y cultura. Por tanto, la necesidad de recoger la idea antigua de bibliotecas públicas, museos públicos y no solo colecciones de la nobleza, y de enseñanza-educación para la mayoría de la población.
Museo de Guadalajara
Aunque este museo tiene mucha relación con la recogida de materiales culturales, debidas a las diversas desamortizaciones del siglo XIX, la más importante la de Mendizábal, Madoz, que alguien tuvo la feliz idea, de recoger parte de todo ese material de esta geografía, para que no se dispersase-perdiese de forma escandalosa, como sucedió en gran parte con toda esa riqueza en el país. Actualmente las colecciones que se conservan van desde el siglo quince al siglo XXI.
Desconozco, si todos los antiguos museos provinciales, forman como una red de museos provinciales, para formar sinergía, crear ideas y sugerencias y proyectos de exposiciones y de intercambio de obras. Si se me permite, si no existe, quizás, podría ser la ocasión, para que lo estudien y analicen y valoren.
Las ciudades y, sus museos, que están al lado de los gigantes núcleos urbanísticos, de nuestra sociedad-territorio-nación, tienen el hándicap, diríamos de tener una gran competencia, porque qué o qué puede ser comparable con el Museo del Prado o el Reina Sofía u otra docena de grandes museos de la capital.
Pero también, pienso que los ciudadanos, primero los que viven en sus alrededores, de cien o doscientos mil metros, y, en general, de otras distancias más largas, se tienen que valorar, esas docenas de “medianos museos”, en tamaño y en cantidad de material que está sembraba Celtiberia-Hispania-Iberia, y que constituyen, experiencias de conocimientos dignos de aprender y aprehender.
Deberíamos los que existimos y vivimos en estos terruños, ser conscientes, que no solo debe existir un turismo de playa y arena y sol y bikinis, sino también, en esos lugares, buscar pequeños y medianos museos que nos pueden proporcionar, nuevas visiones de y sobre la realidad. Este es uno de ellos, en sus largos tránsito y viajes, puede usted dedicar un trozo de tarde o mañana para visitarlo. En definitiva, visitarse usted a si mismo, intentar entenderse y comprenderse mejor.
