El Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha cierra un 2020 marcado por la pandemia, que obligó a suspender los plazos procesales de marzo a junio, lo que se tradujo en una disminución del 12 por ciento de los asuntos ingresados, con 174.594.
Pese a esa reducción, el número de asuntos ingresados sigue siendo muy elevado, rebasando en algunos órganos la capacidad. A esta realidad, se suma la ralentización del flujo de señalamientos una vez retomada la actividad judicial, lo que ha reducido también la capacidad resolutiva del sistema, con 162.750 asuntos resueltos, aumentando así la pendencia en un 8,1 por ciento, con 158.022 asuntos pendientes en trámite a 31 de diciembre del año pasado.
Pendencia que se ha visto especialmente incrementada en las Salas de lo Contencioso-Administrativo, sobre todo a partir de septiembre, cuando, a raíz de la Ley 3/2020, la Sala asumió la ratificación judicial de las medidas sanitarias adoptadas desde el gobierno regional, aumentando su litigiosidad en un 3 por ciento, con 2.724 nuevos asuntos ingresados y 389 procedimientos de ratificación.
Litigiosidad que también se ha visto incrementada en la Sala de lo Social, con 2.009 nuevos procedimientos, lo que supone un 28,5 por ciento más que el año anterior, alcanzando también un alto grado de resolución, con 1.991 asuntos resueltos.
No obstante, la tendencia ha sido la contraria, con un descenso de la entrada de nuevos procedimientos en prácticamente todas las materias.
En los asuntos civiles se ha reducido un 9 por ciento la litigiosidad, disminuyendo notoriamente los pleitos por las cláusulas suelo, pasando de 6.637 en 2019 a 4.541 en 2020. También se ha visto afectada la tasa de resolución en Jurisdicción Civil, que solo ha alcanzado el 92,86 por ciento.
Son cifras recogidas en la Memoria Judicial 2020, presentada este martes, 27 de julio, por el presidente del TSJCM, Vicente Rouco, en Albacete, donde ha lamentado la situación de sobrecarga que atraviesan en esta materia los Juzgados mixtos de Albacete, Ciudad Real, Guadalajara, Toledo, Illescas, Talavera de la Reina, Tomelloso, Puertollano, Ocaña y Valdepeñas.
Los que si que presentan buenas noticias son los Juzgados de lo Mercantil tras la especialización y conversión de los Juzgados de Primera Instancia de Albacete y Toledo.
En lo Penal disminuye igualmente la entrada de litigios un 15,1 por ciento, con 13.869 asuntos menos que el año anterior. Situación similar en los Juzgados de Instrucción, donde también se redujo la entrada de asuntos un 15,4 por ciento, al igual que en los Juzgados de lo Social y de lo Contencioso-Administrativo, donde se experimentaron unas reducciones del 10,7 por ciento y del 12,4 por ciento, respectivamente.
La memoria recoge también algunas de las principales demandas del Tribunal, como es la ampliación de la planta judicial, con la creación de 32 nuevas plazas para Jueces y Magistrados –seis de ellas correspondientes a plazas en órganos colegiados, 18 a Juzgados y 8 para Jueces de Adscripción Territorial–, ya que el órgano castellanomanchego sigue siendo el último del país en cuanto a número de jueces por habitantes, con 9,9 jueces por 100.000 habitantes.
Asimismo, solicitan una mejora de las instalaciones, agilizar el proceso de digitalización del sistema y la apertura de la nueva Ciudad de la Justicia de Albacete, prevista para septiembre u octubre de 2021, además de la creación de juzgados exclusivos de Violencia sobre la Mujer en cada una de las capitales de provincia.