La sección sindical de CSIF en la Diputación de Ciudad Real denuncia la actitud de la Corporación provincial en su política de asignación de puestos de trabajo y asegura que mientras antes las modificaciones en las distintas jefaturas eran cubiertas por un procedimiento de concurso, ahora se hacen como puestos de libre designación, cambiándose también la definición de los mismos.
Estas modificaciones suponen en la práctica una limitación del acceso a dichas convocatorias por parte del personal de la Diputación, facilitándose el acceso a los funcionarios de otras administraciones públicas.
El sindicato considera que con esta actitud, la Corporación no sólo está negando el derecho legítimo a la promoción de sus propios trabajadores, sino que demuestra una total desconfianza hacia ellos valorando más la experiencia de empleados de otros ámbitos que la de profesionales que ya vienen desempeñando sus funciones en los servicios afectados desde hace mucho tiempo, lo que está generando una sensación de malestar que en nada favorece el buen funcionamiento de la Diputación.
La libre designación es un procedimiento extraordinario para la provisión de puestos de trabajo. Y buena prueba de ello es la reciente sentencia nº 10128/2021 del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, en la que se anula una decisión de la Consejería de Hacienda sobre dicho sistema para ciertas jefaturas. En la sentencia se indica que “el concurso es el sistema normal de cobertura de los puestos de funcionario público”.
La libre designación debe tener una motivación adecuada a su carácter excepcional, y en las propuestas presentadas no se han cambiado sustancialmente las funciones que se realizan. Se ha aprovechado en algunos casos la jubilación del personal que venía ocupando esos puestos para cambiar el sistema de designación. En otros, se han vuelto a crear plazas que fueron amortizadas en su momento, sin cambio sustancial de las funciones desempeñadas.
Por todo ello, CSIF solicita que se respete la legislación vigente en la asignación de las plazas vacantes y no ‘caiga en saco roto’ la experiencia y valía de los trabajadores de la Diputación. La promoción de los trabajadores es un derecho y la mejor forma de refrendarlo es no poner trabas administrativas al acceso a las plazas que vayan quedando vacantes en la administración.