«Los casi 700 metros de variante prevista hace casi ya tres lustros para Mestanza, con la que desviar el numeroso tráfico pesado que se ve obligado a transitar por el sinuoso casco urbano de la localidad, quedan en terreno baldío para esta infraestructura tras haber agotado su paciencia los titulares del suelo por donde iba a discurrir».
Así lo lamenta el alcalde, Santiago Buendía, quien esta semana ha tenido que cumplir con la normativa reglamentaria y “he dado permiso a la solicitud de propietarios para acotar parcelas que cedieron ya en su día para los camiones y maquinaria que las obras de recrecida del Montoro obligaron a establecer como alternativa circulatoria”.
Para facilitar durante la recrecida del Montoro el paso de los grandes camiones que fue necesario emplear, se habilitaba dicho trazado porque, “como en la actualidad, ya era imposible que lo hicieran por nuestro casco urbano por la estrechez de la travesía”, apunta Buendía en nota de prensa, quien entiende el proceder ahora de los propietarios.
A raíz de todo ello, las corporaciones municipal y provincial establecieron un marco de entendimiento para que dicho itinerario incidental, uniendo las carreteras CR-501, en dirección a Mina Diógenes y CR-5011, en dirección a Solanilla del Tamaral, “diera paso a una variante con todas las de la ley y exigencias técnicas”, dice el alcalde.
Por eso ya en 2008 su antecesor en el cargo planteaba al vicepresidente de la Diputación de la época la necesidad de realizar esta infraestructura, comprometiéndose el responsable provincial a trabajar para redactar un proyecto y convenir algún acuerdo con la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha para su viabilidad y ejecución.
En 2010 Ayuntamiento y Diputación firmaron un convenio al respecto y años después, en torno a 2015, la Corporación provincial incluía en su Plan de Carreteras esta variante, para la cual reservaba de 775.000 euros, algo por lo que nuevamente el pasado año, en el mes de febrero, le preguntaba Buendía al actual presidente José Manuel Caballero, en una reunión mantenida en el Palacio Provincial.
En esa reunión, “le hice referencia a la variante que se hizo provisionalmente cuando se procedió a la recrecida del Pantano de Montoro”, costeada en su día por la UTE que realizó la nueva presa al embalse y que, tras terminar los trabajos, “dejó también de pagar, como es lógico, a los propietarios ese arrendamiento temporal”.
Pese a que también estos han tenido pagado sus contribuciones de rústica íntegras, la vía se ha mantenido operativa hasta ahora, presentando ya un firme tremendamente dañado, pero facilitando aún el trasiego de vehículos pesados sin pasar por el casco urbano y el acceso a la depuradora de aguas residuales de Mestanza, sita en el entorno.
Asimismo, en la reunión del pasado año con el presidente de la Diputación, el alcalde mestanceño también le hizo ver el mal estado de esa variante circunstancial, algo que estuvo obligando a camioneros a desviarse por la CR-5011, dañando el puente que cruza el río del mismo nombre.
Para Santiago Buendía “es necesario que en este punto neurálgico de cruce de carreteras hacia la zona suroriental de la provincia y su enlace con la de Jaén, se actúe de inmediato, porque además la CR-5044 es muy utilizada por servicios sanitarios y por el trasporte escolar y de viajeros, además de que es la puerta de entrada desde la N-IV al Parque Natural del Valle de Alcudia”.