Luis Mario Sobrino Simal.- Ayer por la tarde y siguiendo una convocatoria a nivel nacional se concentraron en la Plaza Mayor de Ciudad Real más de 300 personas para exigir el cese inmediato de la violencia entre Israel y Palestina.
La convocatoria surgió de dos mujeres a través de las redes sociales y la respuesta popular fue inmediata.
Las imágenes que estamos viendo estos días en diversos medios reflejan una situación angustiosa que dura décadas.
Dos pueblos, dos culturas y dos intereses enfrentados.
David, Palestina contra Goliat, Israel.
Fuerzas militares nada comparables entre los dos pueblos.
Israel con una política de ocupación bendecida por Estados Unidos y criticada por muchos países sigue ejerciendo lo que muchas ONG llaman política genocida y de apartheid.
Ayer muchas mujeres palestinas narraban sus tristes sensaciones en esta tragedia humana.
Algunas de ellas, muy jóvenes se dirigieron a los asistentes para explicar lo que significaba la palabra NAKBA de la convocatoria y que según leemos en Wikipedia, “es un término árabe que significa «catástrofe» o «desastre», utilizado para designar al éxodo palestino (en árabe, al-Hijra al-Filasteeniya). Según la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) son refugiados palestinos las «personas cuyo lugar de residencia habitual era el Mandato Británico de Palestina entre junio de 1946 y mayo de 1948 y que perdieron sus casas y medios de vida como consecuencia de la Guerra árabe-israelí de 1948».
Los concentrados, sobre todo mujeres, han criticado duramente con sus palabras y cánticos la actual situación que vive el pueblo palestino que sufre ataques indiscriminados diariamente contra su gente.
Estos eran algunos comentarios expresados a través de los micrófonos:
«Lo que está pasando ante la mirada insensible de la comunidad internacional es un genocidio brutal»
«Netanyahu no quiere la paz, quiere el exterminio de un pueblo y la a ocupación por parte de los colonos es el medio.»
“Israel no aprendió del pasado nazi que exterminó a miles y miles de judíos, y esa política antihumana es la que está llevando a cabo ahora y desde hace años contra Palestina.”
Al final de la concentración se ha leído un comunicado expresando la condena unánime del genocidio pidiendo y exigiendo algo más que buenas palabras por parte de la comunidad internacional.
