Los representantes sindicales de UGT y CCOO en el seno de la empresa pública regional Geacam han exigido al Gobierno de Castilla-La Mancha que aborde la negociación del convenio colectivo, caducado desde 2012, al tiempo que han anunciado una ronda de asambleas provinciales para fijar un calendario de movilizaciones ante los «continuos engaños» que, a su juicio, han derivado en una «crítica situación de conflictividad».
En rueda de prensa celebrada este lunes, el coordinador regional de UGT en Geacam, Diego Rubio; el responsable estatal de UGT de bomberos forestales, Ángel Rubio; el secretario regional de CCOO Industria, Ángel León, y el responsable de la sección sindical de CCOO en Geacam, Manuel Amores, han coincidido en expresar su desconfianza ante las recientes declaraciones a Europa Press del viceconsejero de Medio Ambiente, Fernando Marchán, quien ha asegurado que planteará este viernes iniciar las negociaciones del convenio.
Así, Ángel León ha enfatizado que sindicatos y trabajadores «están cansados de declaraciones de intenciones que no tienen un resultado en la regulación, actualización y mejora de los derechos laborales y las condiciones de trabajo».
León ha recordado que el convenio colectivo que más tiempo lleva caducado en Castilla-La Mancha es el de Geacam, y ha lamentado que «no es de recibo» que se tenga a la plantilla en esta situación tras años de «declaraciones de intenciones» que no se han materializado. Así, ha advertido de que después de Semana Santa los sindicatos van a convocar asambleas en las cinco provincias para preparar una «hoja de ruta» de movilizaciones en la que tampoco se descarta la huelga.
Ha subrayado que la plantilla de Geacam cuenta con 2.500 trabajadores declarados como «esenciales» a lo largo de la pandemia, y que no han dudado en prestarse como voluntarios a servicios que incluso excedían sus competencias. «Fueron por todo ello reconocidos por el Gobierno regional, pero todo se han quedado en palabras», ha recalcado.
Por su parte, el coordinador regional de UGT en Geacam, Diego Rubio, ha insistido en que la plantilla se siente «engañada y defraudada» tras años en los que no ha arrancado una negociación del convenio colectivo real y con garantías legales y administrativas.
«Los halagos no se traducen en nada», ha exclamado, para enumerar a continuación carencias del servicio que recuerdan a los «recortes de Cospedal». A su juicio, desde que ha entrado la última gerencia en 2019 los trabajadores «han ido hacia atrás», con una «altísima» conflictividad laboral, reducción de personal, turnos y descansos; y envío de circulares contrarias al convenio.
También ha alertado de la «altísima interinidad» de la plantilla, la alta tasa de contratos en fraude de ley, el recorte en retenes y vigilancia fija, la falta de formación y unos derechos «cada días más mermados y pisoteados». «Hay 300 vacantes que se tenían que haber cubierto, el 90% de los contratos de Asistencias Técnicas están en fraude de ley y el 25% de la plantilla corresponde a contratos temporales», ha lamentado. «Si tenemos que plantear huelga lo haremos, porque estamos hartos de recortes», ha remachado.
El responsable de la sección sindical de CCOO en Geacam, Manuel Amores, ha abundado en estas quejas destacando que la negociación del convenio debe satisfacer las reivindicaciones de bomberos forestales y personal de Asistencias Técnicas. Además, ha dudado de las declaraciones del viceconsejero. «El viernes solo habrá consejo de administración, pero con los sindicatos no hay ninguna reunión pendiente en esta semana», ha aclarado.
En los mismos términos se ha expresado el responsable estatal de UGT de bomberos forestales, Ángel Rubio, quien ha instado a gerencia y Gobierno regional a que «se dejen de artimañas y apuesten por lo público» para solventar la «total desregularización» de la plantilla y su adecuación a la actual normativa.