Santos G. Monroy.- Se llega a la laguna de Almodóvar entre olivares y almendros, y devuelve al viajero un curioso paisaje de belleza devastada. Los reflejos lagunares y las trazas rosadas del vuelo de las aves contrastan con la completa aniquilación de la que fuera una soberbia muestra del patrimonio histórico y geológico de la comarca.
La historia viene de lejos, desde el inicio de la extracción de minerales y puzolanas que a lo largo de las décadas ha engullido el volcán del Cerro de los Molinicos y, consecuentemente, todo resto de la legendaria fortaleza árabe que dio nombre a Almodóvar y las antiguas cavas, o cuevas de gitanos.
Solo quedan los restos de uno de los molinos y de un polvorín de la Guerra Civil, a los cuales es imposible acceder al encontrarse en propiedad privada, muy probablemente condenados a la desaparición, completamente desprovistos de protección administrativa.
Lo curioso de este paisaje es la fagocitación absoluta del patrimonio histórico y natural a merced de los intereses empresariales, y a unos niveles extremos de exterminio, ya que se han barrido de un plumazo desde la historia medieval de la localidad hasta los testimonios de la contienda civil y los usos y modos de vida de la España de los años 40 y 50.
Aún así merece la pena abandonarse por este camino y disfrutar del paisaje, de los cortes vertiginosos en la cantera y del reflejo de esta laguna efímera, que, esperemos, podamos legar a quienes nos sucedan…
Un territorio de gran riqueza natural y un extraordinario patrimonio…..
Respetando las huertas, algo habría que hacer para dar algo más de belleza a un entorno saqueado y horrrososo en algunas zonas. Lo último es la colocación de contenedores de obras, tras fumigar el suelo
Es un lugar natural de paseo y disfrute, además del patrimonio histórico en parte irrecuperable, sobre el que precisaría iniciativas e implicación del pueblo y sus representantes en el ayuntamiento
Pero algo meditado, bien estudiado, no improvisaciones y chapuzas, como los montones de tierra que se depositaron hace años
¿Alguien se anima?
La zona necesita un plan de reforma importante. El primer punto por supuesto seria que las empresas privadas abandonasen la zona (que por si fuera poco utilizan de vertedero) El segundo punto la recuperación del acuífero de forma permanente y la expropiación de los terrenos colindantes (o al menos la imposibilidad de poner vallas sin ton ni son) Y el tercer punto mejorar el acceso y poner en marcha negocios que hagan lucrativos los 2 puntos anteriores como un camping con embarcadero, rutas que muestren y hagan accesibles las zonas mas interesantes como el polvorín y el castillo etc… Pero cuando te paras a mirar el presupuesto de esta utopía te das cuenta de que es muy difícil si no imposible. Es una zona llena de posibilidades para una industria de turismo rural que temo sin embargo que tardara décadas en mostrarse como una opción interesante y mientras tanto seguirá deteriorándose sin remedio.