El aparato portátil de Rayos X está siendo útil para luchar contra el COVID y seguir la evolución de los enfermos, según publica hoy en el periódico digital El Español, que dirige Pedro J. Ramírez, la periodista María José Fuenteálamo. Obviamente no se trata del invento del piedrabuenero Mónico Sánchez, sino de otro adaptado y dotado con las ultimas tecnologías, aunque la idea de reducir a una maleta el viejo armatoste fue de Mónico.
La periodista se hace eco también de la reciente aparición de la biografía novelada “El rayo indomable” de Manuel Valero y Eduardo Estébanez, nieto del inventor.
“Después de intubar a un paciente, los intensivistas suelen tomar imágenes por rayos X para comprobar que el tubo está en su sitio. Dado que no conviene mover al enfermo, se hace con un aparato de rayos X portátil, una de las herramientas más utilizadas en las UCI, imprescindible en estos tiempos de Covid para detectar neumonías y sus complicaciones tipo neumotórax, atelectasia -disminución del volumen pulmonar-… “, según los médicos consultados por la periodista. “Hablamos de tecnología médica que hoy utiliza los sistemas más punteros y cuyo inventor fue, hace más de 100 años, un español”. El reportaje hace un repaso de la odisea de Mónico, desde sus orígenes humildes hasta acabar codeándose con la élite científica de Nueva York. Y, tal como relata el libro, menciona su vida sentimental, la tragedia familiar y los tristes episodios de la guerra civil en la que los dos bandos lo pusieron en la diana.
La redactora de El Español se puso en contacto con los autores que le contaron la génesis de El rayo indomable del que rescata algunos párrafos:
— ¿Cómo llevas lo tuyo?, preguntó el jefe.
— Lo tengo casi a punto. Si conseguimos generar una alta tensión de 100.000 voltios con muy poca intensidad, de unos amperios… todo ese armario puede meterse en una maleta. La media tonelada de peso la podemos convertir en 12 kilos y cualquier médico podrá llevar los rayos al domicilio de los pacientes. La alta frecuencia como equipaje.
-Es una idea magnífica. Tal vez si te das prisa, puedas llegar a exponer el año que viene en la Feria de Electricidad del Madison Square.
La invención de Mónico y su idea de reducir a una maleta cómoda de transportar ha sido útil hasta estos días difíciles de la pandemia. “Era lo que intentó Mónico en el último viaje que hizo a Nueva York en 1946 en compañía de su yerno, el doctor José Estébanez: modernizar el aparato y continuar con los avances en su laboratorio de Piedrabuena, pero todo cambió con la guerra que arrasó con todo. Como señala el reportaje, si no hubiera habido guerra tal vez hubiera convertido su pueblo natal en una ciudad puntera de alta tecnología en aparatos médicos”, dice uno de los autores de El rayo indomable, Manuel Valero.
Hoy la memoria de Mónico Sánchez, que fue presidente de la Cámara de Comercio hasta su muerte en 1961 está siendo rescatada. En el Museo Nacional de Ciencias y Tecnología de La Coruña cuenta con un departamento fijo en el que se exponen maletas y tubos de vacío que construyó en su laboratorio.
Pequeño periódico El español, para hablar de alguien tan importante.
El ‘Tesla’ manchego injustamente olvidado…..