El temporal de precipitación, frío y sobre todo de nevadas provocado por la borrasca ‘Filomena’ y que se agudizará este viernes y sábado, podría ser la antesala de la primera ola de frío de este año, según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología que espera que la próxima semana el mercurio pueda bajar a temperaturas mínimas de -8 a -10 grados centígrados (ºC) en capitales de varias provincias del interior peninsular.
Podrá dejar cantidades muy importantes entre el viernes y el sábado que podrían llegar a 40 ó 50 litros por metro cuadrado en el sur de Madrid, Toledo, Cuenca, Ciudad Real o Albacete.
El portavoz de la AEMET, Rubén del Campo, ha explicado a Europa Press que este episodio de nevadas es «sin duda uno de los más grandes del siglo XXI» en España por su extensión e intensidad, ya que la predicción para la media noche del domingo, cuando remitan las nevadas apunta a que prácticamente las dos mesetas en su totalidad (Castilla y León, Madrid y Castilla-La Mancha), el interior de las comunidades cantábricas, Aragón, la Comunidad Valenciana, Cataluña y zonas de Andalucía oriental y del este de Extremadura tendrán su suelo cubierto de nieve.
«Será probablemente la más extensa», ha precisado pero también serán «muy intensas» ya que es la primera vez que se activa el aviso de riesgo extremo (rojo) en Castilla-La Mancha y en la Comunidad de Madrid.
«Es un episodio muy adverso y excepcional», ha insistido Del Campo que añade que para recordar algo semejante hay que remontarse a hace 40 o 50 años en la Ciudad de Madrid, por lo que de cumplirse los pronósticos esta será una de las grandes nevadas históricas en la capital así como en muchas zonas del interior. «Hay una alta probabilidad de que este episodio sea muy severo y supere las nevadas históricas de enero de 2009 y de 2018», ha comentado.
Tras ‘Filomena’, llegará un anticiclón que dará lugar a cielos despejados y vientos en calma, que sumados al enfriamiento por la cobertura de nieve dará lugar a temperaturas mínimas «muy bajas» donde ya ha nevado y prevé que podría llegarse a niveles de ola de frío, con temperaturas de -8 o -9ºC en las capitales de Castilla y León, Madrid, Teruel y Castilla-La Mancha. «Son valores muy fríos y poco habituales en las capitales que podrían generar problemas de movilidad», ha comentado.
No obstante, prevé que la próxima semana las temperaturas serán en general entre 3 y 5 grados centígrados más frías de lo normal para estas fechas y apenas se esperan precipitaciones, y más allá, la semana del 18 de enero las temperaturas seguirán siendo frías, aunque más cercanas a los valores normales y lloverá en el suroeste.
MÁS LLUVIA EN DOS DÍAS QUE LO NORMAL EN TODO EL MES
De momento, el portavoz ha destacado que ‘Filomena’ podrá dejar cantidades muy importantes entre el viernes y el sábado que podrían llegar a 40 o 50 litros por metro cuadrado en el sur de Madrid, Toledo, Cuenca, Ciudad Real o Albacete, llegarán a cerca de 40 litros en la Comunidad Valenciana. En concreto, en la ciudad de Madrid se pueden superar los 30 o 40 litros por metro cuadrado.
«En dos días se superará el volumen total de precipitaciones mensual normal en el mes de enero en áreas como Castilla-La Mancha o Madrid», ha apostillado Del Campo.
Pero además, no solo caerán nevadas, sino que en el área del Estrecho, especialmente en Cádiz y Málaga, entre el viernes y el sábado se podrán superar incluso los 100 litros por metro cuadrado de lluvia, un valor superior a los 70 u 80 litros por metro cuadrado que corresponden con el valor normal del mes de enero.
NO HABITUAL PERO POCO FRECUENTE EN LOS ÚLTIMOS AÑOS
Por su parte, el meteorólogo y exportavoz de la AEMET, Ángel Rivera, ha explicado a Europa Press que el actual episodio de nevadas provocado por ‘Filomena’ es una «situación extraña pero no desconocida», ya que eran más habituales en los años 70 y 80, cuando se producían «nevadas muy importantes». Si bien, señala que sí son menos frecuentes en los últimos años, tanto este tipo de nevadas como de temperaturas mínimas tan bajas.
Rivera, que era portavoz de la AEMET en enero de 2009, cuando el 9 de enero una nevada inferior colapsó Madrid así como el entonces aeropuerto de Barajas, recuerda que la situación de predicción fue muy diferente, porque en aquella ocasión la nevada se debió a una DANA que llegaba del Mediterráneo, que iba a dejar chubascos intensos de nieve, pero con una mayor dificultad en su predicción.
En este caso, la situación de predicción es mucho más clara, pues afecta de forma más extensa y homogénea a más territorio. Si bien, recuerda que el aviso inicial era amarillo y cuando se vio que el nivel debía ser naranja fue con muy poca antelación. No obstante, aquellas nevadas acumularon unos 7 u 8 centímetros de nieve en Madrid, bastante menos que lo que probablemente dejará ‘Filomena’, pero el caos circulatorio generó «gran jaleo político».
«En este caso hay menos nivel de sorpresa. Aquella nos pilló más de improviso porque era mucho más difícil de predecir y la predicción podría haber sido mejor, pues se pensaba en 1 a 3 centímetros de nieve inicialmente», ha comentado.
Por otro lado, ha explicado que un estudio científico apunta a que ‘Filomena’ podría estar motivada por un calentamiento súbito de la estratosfera, algo que influye en la evolución del chorro polar y que puede provocar un tiempo aún más frío. Si bien, en su opinión, esta posibilidad meteorológica no sería la causa del temporal que afecta a España, porque el calentamiento súbito de la estratosfera suele tener su efecto «semanas después, no dos o tres días después, según esa actual teoría».
Se trataría, no obstante, de un fenómeno que los años en que se produce suele hacerlo en invierno, pero que según Rivera sus efectos suelen reflejarse dos o tres semanas más tarde. «La cuestión está en pleno estudio. En mi opinión no tiene mucha relación con Filomena, pero no se puede pontificar en absoluto», admite, pero añade que antes de que se hubiera producido ese calentamiento ya había aquí una borrasca fría.
Sí ha subrayado que en algunas zonas de España 2021 ha llegado con «algo más frío de lo habitual en los últimos años» pero no se trata de una situación «anormal».
Por último, vaticina que la próxima semana sí habrá temperaturas muy bajas «incluso de récord» pero añade que estos episodios de frío no son desconocidos. De hecho, ha apuntado que temperaturas de -12 a -14ºC a 1.500 metros eran «mucho más habituales» en los años 70 y 80 que en los últimos años en los que son «poco frecuentes». Rivera apunta así que en los últimos años las temperaturas más frías a 1.500 metros eran de -7 o -8ºC. «Había más días de frío en esas décadas», insiste.