Santos G. Monroy.- Algún incauto preso de la Santa Hermandad se consolaba, mientras caminaba en la cuerda de cautivos entre los arcabuces de los soldados, de que el destino de su castigo fueran las minas de Almadén, convencido de que trabajar aquí sería una bicoca en comparación con la horrenda condena a galeras, donde si uno no acababa ahogado en el fondo del Mediterráneo lo hacía con la espalda despellejada por el látigo o con el cráneo partido por los cañonazos de los bajeles turcos.
Poco tardaba el pobre en caer de su error a su llegada a Almadén, donde le esperaba una pesadilla en las tinieblas: si uno no moría de desfallecimiento y fiebres lo hacía succionado por pozos insondables o consumido entre los espasmos del mal de azogue. Solo los más afortunados podían, simplemente, morir de la tristeza de no ver jamás la luz del sol, conducidos en un bucle delirante, de la celda al tajo, por la siniestra galería de forzados.
Almadén parece haber heredado la maldición de aquellos presos que forjaron la riqueza de los potentados y validos de las monarquías hispánicas, y de poco le ha valido su historia apasionante y su legado patrimonial, natural e industrial de sobrecogedora belleza.
Del mismo modo que se embarcaba la plata líquida de Almadén en los galeones españoles que partían a las minas de oro del Virreinato del Perú se escapa la vida en el municipio y la comarca, pese a la declaración de estas minas de mercurio, las más grandes y antiguas del mundo, como Patrimonio de la Humanidad en 2012.
El pueblo y las minas de Almadén fueron escenario de una historia que tiene sus albores en la Antigüedad y se ha prolongado durante siglos con el dolor, esfuerzo y sufrimiento de esclavos y condenados, de mineros y de trabajadores.
La declaración de la UNESCO fue una emocionante reparación. Pero en estas evocadoras ruinas dieciochescas del pozo de San Teodoro siguen yaciendo muchas ilusiones. Bajo el espectacular baritel de San Andrés, una infraestructura subterránea única en el planeta, comparable a las maravillosas ingenierías de los enanos de Tolkien, se lamentaba hace unos días uno de los trabajadores de Mayasa, reconvertido en guía de este subyugante Averno a 50 metros de profundidad: «Recibimos con ilusión la declaración de la UNESCO, pero pronto comprendimos que no sería suficiente si las administraciones no apuestan por Almadén, que ahora se muere».
Tras el cierre de las minas y la reconversión de Mayasa no ha fructificado ningún proyecto alternativo para la economía de la zona. Ni el polígono industrial prometido, ni la mejora de infraestructuras sanitarias y educativas, ni las comunicaciones. Nada. Almadén es un bello paraje prisionero en el siglo XVIII como en una campana del tiempo.
La abnegada plataforma ‘Forzados’, que lucha por la revitalización de la comarca, ha sido una simple pelota en el toma y daca político, y los intentos de crear iniciativas institucionales e intermunicipales en defensa de la opción sur de la autovía A-43 Mérida-Ciudad Real a su paso por Puertollano y Almadén han decaído, anegadas en la indiferencia de los Gobiernos nacionales de uno y otro signo que bastante tienen, al parecer, con contentar a las minorías que les sostienen y a los nacionalismos periféricos.
Pocos creen ya en el proyecto de autovía, una promesa rutinaria y caduca de tanto manoseo político para la que parece haber pasado la hora. Ojalá llegue algún día porque será el único resorte para la atracción empresarial. Pero en el ínterin se hace necesaria, muy especialmente para la comarca de Almadén, la inversión pública, la mejora de las infraestructuras, la dignidad en los servicios sanitarios. Almadén ha vivido secularmente en el pozo. Ya es hora de que salga de él.
Bueno, por ejemplo, Carlos V utilizó el mercurio de Almadén como aval para conseguir la corona del Sacro Imperio. Una deuda histórica del Estado con Almadén…..
Enhorabuena por el artículo . Es una realidad que nuestra comarca está abandonada a su suerte por las administraciones. Sin buenas carreteras; sin interés nada más que por engañar y promesas incumplidas de muchos años…. Sin ir más lejos la Plataforma Forzados llevo una proposición no de ley con medidas propuestas por ellos y votó en contra el psoe y ciudadanos porque la presentó el pp… sin embargo , anteriormente se presenta por ciudadanos una proposición de apoyo a la industria de la cuchilleria de albacete y votaron todos a favor para que vean ustedes las diferencias …Que indignación sentimos en esta comarca.. y la corporación municipal no da ruidito ninguno ..y si hablamos de la diputada regional la gente de Almadén sentimos verguenza ajena..
Gracias de corazón , por el artículo.
Precioso artículo.
Que bien redactado y que gran verdad,estamos olvidados y destinados al olvido ,ni el reconocimiento de la UNESCO nos ha beneficiado a la comarca en nada,solo me queda manifestar mi pena como miles de los que un día hicimos la maleta en busca del dorado ,dejando atrás toda nuestra infancia y adolescencia en una zona extraordinaria pero sin futuro.