Coincidiendo con la conmemoración del Día Internacional de las Mujeres Rurales, que se celebra hoy 15 de octubre, la Red Castellano Manchega de Desarrollo Rural (RECAMDER) ha ensalzado el importante papel que la mujer tiene en la lucha contra la despoblación y en la supervivencia de los pueblos.
El presidente de RECAMDER, Jesús Ortega, ha resaltado que “el mundo rural está en deuda con las mujeres que han apostado por él, ya sea emprendiendo o desarrollando su proyecto de vida, porque son mujeres fuertes y valientes que han escapado de las garras del éxodo que vienen padeciendo los territorios rurales y se han comprometido firmemente con el futuro de nuestros pueblos”.
En este sentido, Ortega ha recalcado que “sin pueblos, no hay futuro; y sin mujeres, no hay pueblos” por lo que ha señalado que “es de vital importancia que se tenga muy en cuenta a esta parte de la población y que se creen los escenarios necesarios para que el medio rural les ofrezca los servicios que reclaman y así conseguir dos objetivos: evitar las mujeres rurales tengan que marcharse a la ciudad y propiciar que las mujeres de ciudad vuelvan al pueblo”.
El máximo responsable de RECAMDER ha indicado que “las mujeres rurales son básicas en la lucha contra la despoblación rural y constituyen la clave para intentar reducir la progresiva masculinización y envejecimiento del mundo rural”.
Según el Servicio de Estadística de Castilla-La Mancha, la población femenina de los municipios de menos de 2.000 habitantes se ha ido reduciendo hasta suponer el 47,9% de la población en 2019, un porcentaje que es mucho menor según disminuye el tamaño del municipio. En los municipios de menos de 100 habitantes, las mujeres suponen el 41,4% del total de la población, mientras que en los municipios de más de 2.000 habitantes alcanzan el 50,3% de la población total.
Por ello, el presidente de RECAMDER ha recordado que el punto octavo del Pacto contra la Despoblación en Castilla-La Mancha, que fue ratificado por la Red Castellano Manchega de Desarrollo Rural, alude a la necesaria igualdad, visibilidad y participación de la mujer en el medio rural y a eliminar los obstáculos que evitan la plena igualdad de oportunidades, tanto entre hombres y mujeres, como entre el medio rural y el urbano.
Además, el Manifiesto de Sigüenza aprobado en diciembre de 2018 denunció la marcada feminización de trabajadores no asalariados en el medio rural y reclamó la universalidad de la cotitularidad de las explotaciones agrarias, “donde la mujer ha trabajado hasta ahora sin ser beneficiaria de los derechos de la propiedad y sin tener acceso a bonificaciones o ayudas”, apuntaba Ortega.
Asimismo, resaltaba que las mujeres rurales tienen un gran espíritu emprendedor y un buen número de las ayudas Leader que gestionan los Grupos de Acción Local tienen como destinatarias a mujeres. Además, ha confiado en que “la lección aprendida con la pandemia del Covid-19 y los confinamientos, sumado a la posibilidad de teletrabajar, anime a más mujeres a asentarse en los pueblos y a disfrutar de la calidad de vida que sólo puede ofrecer el medio rural”.
“Desde RECAMDER y desde los 29 Grupos de Acción Local de Castilla-La Mancha vamos a seguir trabajando al lado de las mujeres rurales, ayudándolas en todo lo que necesiten, dándoles visibilidad y apoyándolas en sus justas reivindicaciones”, concluía el presidente de la Red Castellano Manchega de Desarrollo Rural.