Cuando hace 23 años nacía la Asociación para el Desarrollo Sostenible ‘Valle de Alcudia’, los ayuntamientos y colectivos privados que la integran, representado hoy ya a doce municipios, se conjuraron para encontrar, de la mano de fondos europeos para zonas especialmente deprimidas, una alternativa de futuro y frenar la ingente despoblación.
Tiempo en el que cuatro de estos programas europeos han posibilitado una inversión de casi 38 millones de euros, con una ayuda pública de más de 12 millones de euros, dando pie a la creación de 150 empresas y a la modernización de otro centenar más, con lo que se constata la creación de 300 nuevos empleos y la consolidación de otros 250 más.
Es el balance sucinto y esperanzador de un colectivo público-privado cuyo objetivo permanente es mejorar la calidad de la población local, “para lo cual multiplicamos por tres, cada euro público invertido”, refiere su presidente, Pablo Toledano, quien recalca que todo es posible sorteando incluso los periodos de crisis económica de este siglo.
El apoyo a las pymes y a los autónomos “es primordial”, apunta el también alcalde de Brazatortas, favoreciendo formación, innovación y ofreciendo infraestructuras y servicios que supongan no solo el mantenimiento de las empresas existentes, sino también el asentamiento de nuevos emprendedores en esta comarca.
Y además incidiendo en colectivos que mayormente sufren las consecuencias del paro, los jóvenes, pero mucho más especialmente en las mujeres, “colectivo muy afectado por el desempleo si tenemos en cuenta que más del 60% del desempleo de la comarca, es del sector femenino”, señala el también alcalde de Brazatortas.
De hecho, para este grupo de desarrollo la mujer es uno de los pilares más importantes del medio rural, “transmisor del arraigo y del apego al medio rural y es gracias a ella que se contribuye a fijar la población y de este modo frenar unos de los graves problemas que tiene el territorio, el despoblamiento y el envejecimiento de la población”.
Cabe así recalcar que la densidad de población comarcal es de poco más de 5 habitantes por kilómetro cuadrado, contando con municipios como Mestanza, San Lorenzo de Calatrava o Solana del Pino que están por debajo incluso, con 3 habitantes por kilómetro cuadrado. Indicador éste que “convierte a este Grupo de Acción Local en uno de los seis más despoblados de toda Castilla La Mancha, con claro riesgo de despoblación”.
Constante lucha para aminorar el despoblamiento
Con un grado de ruralidad comarcal del 100% y con todos los núcleos perdiendo población, especialmente los más pequeños, se agrava progresivamente el problema como del despoblamiento, “aspecto éste crítico para nuestra comarca, debido a la baja tasa de natalidad, a la emigración de la población joven y al envejecimiento general de la población”, dice Toledano.
En este contexto, crece paulatinamente el número de personas mayores, que a su vez requieren de más servicios, al tiempo que se multiplican las intenciones de emigración hacia zonas urbanas próximas por parte de la población joven, acrecentando el riesgo de abandono y desarticulación del sistema de poblamiento de amplias zonas de la comarca.
Estos argumentos justifican que la Estrategia de Desarrollo Local Participativo que articula la labor del Grupo de Acción Local a favor de un desarrollo local se justifique en dos objetivos generales prioritarios, como son frenar el despoblamiento, evitando la emigración especialmente de mujeres y jóvenes y, en segundo lugar, lograrlo a través de la generación de empleo.
De tal manera que el emprendimiento de la población joven es prioritario también para destinar ayudas LEADER, propiciando para este sector inversiones empresarial en las que los jóvenes sean sus beneficiarios, como vía imprescindible para garantizar su arraigo y no estén en la tesitura de emigrar ante la falta de oportunidades laborales.
Pilar muy importante para la ADS es también la industria agroalimentaria local y la promoción y valorización de sus productos, con especial interés en modernizar cooperativas de aceite, mejora de queserías artesanales, creación de envasadoras de miel y empresas de transformación de productos cinegéticos y de la dehesa, que diferencian e identifican la marca de calidad de un territorio.
Otro objetivo del Grupo de Acción Local del Valle de Alcudia y Sierra Madrona, es la aprobación de proyectos innovadores, fundamentados en las nuevas tecnologías, en el desarrollo sostenible, o de lucha contra el cambio climático, empresas innovadoras que aplican nuevas tecnologías o medidas de desarrollo sostenible en su producción.
Sin olvidar, para atender a la población más envejecida, surge un nicho de trabajo basado en servicios a la tercera edad, ampliando y modernizando la residencia en Brazatortas y creando una nueva en Villamayor de Calatrava, proyectos que han permitido crear y consolidar cerca de 40 empleos, casi todos ellos de mujeres.
Desde hace 23 años
Así está siendo desde que en 1997 se constituyó este colectivo con el fin de ser el cauce de participación directa de todos los agentes comarcales, agentes socioeconómicos, en coordinación con las administraciones locales. En total 32 socios, doce de carácter público, que conforman el mayor partenariado público-privado del territorio.
“Después de una andadura de más de veinte años, se puede decir que está garantizada una implantación territorial completa debido al grado de participación y a los sistemas articulados dentro de la misma para garantizar dicha participación”, expresa con satisfacción Toledano Dorado.
Los doce términos municipales que contempla el ámbito territorial de actuación tienen 3.423 Km2, suponiendo el 17 % del total de la superficie de la provincia de Ciudad Real, dentro de los cuales las unidades naturales más importante son el Valle de Alcudia y Sierra Madrona, uno de los grandes espacios geográficos de toda la Submeseta sur.
“Un espacio comarcal homogéneo física, social y culturalmente”, recuerda el presidente, reconociendo que “la pertenencia de los doce términos municipales a la comarca agrícola de ‘Pastos’, avala la homogeneidad física y la pertenencia administrativa, desde las perspectivas de la política regional agrícola, conjunta a la Oficina Comarcal Agraria de Almodóvar del Campo”.
Desde el punto de vista socioeconómico, la homogeneidad del territorio radica en su aprovechamiento histórico: al sur aprovechamiento cinegético-forestal, ganadería extensiva para el aprovechamiento de pastos en el centro (en la unidad natural del Valle de Alcudia), y al norte agricultura extensiva de secano con cereales, viñedo y olivar como principales exponentes.
Patrimonio histórico-cultural y natural
Su riqueza radica en dos ámbitos. Una es de carácter histórico-cultural, “cimentada en sus costumbres populares agrícolas y ganaderas, al haber constituido durante siglos la mayor dehesa de invernadero de la cabaña mesteña”, recalca Pablo Toledano, quien no olvida los primeros poblados ibéricos, con pinturas rupestres y restos arqueológicos que atestiguan aquellos primeros asentamientos humanos.
Y el otro radica en el medio natural, como “columna vertebral que configura este entorno, enriquecido por unos altos valores ambientales y paisajísticos”, aprecia el presidente de la ADS ‘Valle de Alcudia’, en alusión al monte mediterráneo y a la destacable también biodiversidad botánica y faunística.
Todos estos aspectos fundamentales del relieve y los paisajes, su fauna y flora, de los recursos humanos y económicos, el patrimonio arqueológico, su riqueza histórico-artística, las costumbres y tradiciones populares,… determinaron la declaración del Parque Natural del Valle de Alcudia y Sierra Madrona y, a nivel europeo, numerosas LIC y ZEPAS, configurando unos espacios Red Natura 2000 de gran relevancia y superficie.
Un modelo de turismo sostenible y diversidad excepcional
“Nuestro patrimonio, natural y cultural, es excepcional, por lo que una de nuestras prioridades de actuación ha sido y es también potenciar el atractivo del territorio a través del turismo, con una utilización eficiente y puesta en valor de sus diversos recursos, con un enfoque de sostenibilidad y de conservación de nuestros recursos”.
Toledano Dorado recuerda desde este punto de vista la creación y mejora de una infraestructura de “alojamientos turísticos de calidad, con incidencia en todos estos años en todos los municipios de la comarca, con creación y mejora de casas rurales en núcleos de población pequeños y grandes”.
Así lo atestiguan ya enclaves y municipios como San Lorenzo de Calatrava, La Estación, Mestanza, Hinojosas de Calatrava o Brazatortas, siendo especialmente paradigmático el caso de Almodóvar del Campo, “que de no disponer de ninguna plaza de alojamiento en el año 2012, hemos pasado a cerca de 80 plazas en hoteles y casas rurales con encanto y con una calidad diferenciada”, concreta el presidente de la ADS.
Por otro lado, se han realizado proyectos productivos de mejora de empresas de ecoturismo con el objetivo de mejorar la oferta complementaria y modernizar sus instalaciones, crear servicios de calidad y diferenciados para un tipo de turista respetuoso con el medio ambiente y deseoso de convivir con las costumbres y tradiciones de nuestro medio rural.
Este modelo de turismo diferente da pie a un plan de sostenibilidad turística del Valle de Alcudia y Sierra Madrona como elemento socioeconómico de base, donde la creación de un producto turístico de Ecoturismo en la Red Natura 2000 en Castilla-La Mancha, a través de un proyecto de cooperación, está suponiendo toda una punta de lanza.
“A su vez los Ayuntamientos, conscientes del motor de desarrollo socioeconómico que es el turismo, hemos realizado inversiones en centros de interpretación y de recepción de visitantes”, destaca Toledano en referencia al Centro de Interpretación del Arte Rupestre y la Metalurgia de Fuencaliente o el Centro de Interpretación del Valle de Alcudia y Sierra Madrona de Brazatortas, subvencionados ambos mediante ayudas LEADER de casi un 90%.
Acerca del Grupo de Desarrollo Rural
El Grupo de Desarrollo Rural del Valle de Alcudia y Sierra Madrona tiene por objeto la dinamización económica y la fijación de población en la comarca a través de las ayudas LEADER, para lo cual prioriza entre sus estrategias de desarrollo las inversiones para crear empresas, mejorar y expandir infraestructuras a pequeña escala en servicios básicos y de ocio, y mantener y rehabilitar el patrimonio rural.
De su Asociación para el Desarrollo Sostenible del Valle de Alcudia, como colectivo sin ánimo de lucro, forma parte una treintena de miembros, entre administraciones locales y colectivos sociales y empresariales de doce municipios de la comarca: Abenójar, Almodóvar del Campo, Argamasilla de Calatrava, Brazatortas, Cabezarados, Cabezarrubias del Puerto, Fuencaliente, Hinojosas de Calatrava, Mestanza, San Lorenzo de Calatrava, Solana del Pino y Villamayor de Calatrava.
Todas las gestiones se cursan a través de su CEDER, cuya sede se encuentra en la Glorieta del Carmen de Almodóvar del Campo y su espacio en Internet es www.valledealcudia.net. También canaliza todo tipo de información a través del teléfono 926 483 400 y en el correo electrónico valledealcudia@local.jccm.es. Además, es Ventanilla Única Empresarial de la Cámara de Comercio e Industria de Ciudad Real y oficina de información turística comarcal, dentro de la Red INFOTUR de Castilla-La Mancha, con su portal web turístico www.eledendelamancha.com.