La temporada primavera verano del año en curso quedará grabada a fuego en los anales de la historia. Quizá como el año de la infamia; el año que vivimos peligrosamente; el año que estremeció al mundo o, por qué no, el año de la estafa a la humanidad, parafraseando títulos de novelas de Jorge Luis Borges, Juan Carlos Aragón, John Reed o Juan Alarcón.
La forma de abordar esta enfermedad vírica llamada Cobid-19 suscita interrogantes, hasta el punto que, según abundantes opiniones, detrás de los mismos estaría la intención de obtener resultados de carácter político con el fin de recortar o suprimir las libertades individuales y colectivas, hundir nuestro nivel de vida y transformar radicalmente la forma de relacionarnos con los demás, utilizando una ingeniería social desconocida, muy superior a la vivida durante la I Revolución Industrial.
La nueva normalidad se caracterizará por la inversión de los valores. Donde lo lógico no es que los enfermos se sientan mal, sino que no tengan síntomas y quieran comerse al mundo; donde los instrumentos de diagnóstico más deseados y utilizados estén desacreditados; donde encontrarse de maravilla cuando una herramienta diagnóstica no fiable se empeñe en decir lo contrario dé lugar a ser catalogado de sospechoso y poder ser encerrado por ello.
Quizá, lo que sucede es que el Covid -19, más que una enfermedad – o, además de serlo- es un evento revolucionario.
Toda revolución se sustenta en dos pilares claves: la transferencia de riqueza de unos grupos a otros y la subversión de los valores aceptados hasta entonces mayoritariamente.
Las revoluciones liberales acabaron con la inmensa mayoría de las tierras comunales pertenecientes a los campesinos –y a los indios, en la nueva América emancipada de los Bolívar y San Martín-. Establecieron el servicio militar obligatorio de larga duración causando un enorme perjuicio al sistema productivo familiar al arrancarles a los hijos varones para engrosar las filas de los nuevos ejércitos permanentes.
Los desplazamientos forzados de los desposeídos de sus tierras a los núcleos fabriles supuso el inicio de un largo camino hacia la imparable ruptura de las relaciones comunitarias, empezando por las de vecindad.
La legislación napoleónica creó el derecho de familia, encubriendo bajo la palabra derecho la destrucción legal de la familia extensa, tradicional desde tiempos remotos, e imponiendo la llamada familia nuclear. Fue el primer golpe a esta institución. Hoy, el objetivo es demolerla de forma inmisericorde.
Se nos cuenta que la burguesía desplazó del poder a la nobleza; se calla que quienes más sufrieron las consecuencias fueron los campesinos al perder sus tradicionales terrenos de labranza.
La Revolución Industrial no habría sido posible sin la demanda de bienes y servicios de un nuevo leviatán estatal desconocido hasta entonces. El impacto de la Revolución en el sector textil fue encabezado por la dimensión de los pedidos de telas, uniformes y tejidos de toda clase para pertrechar el descomunal tamaño de los nuevos ejércitos.
La Revolución Industrial necesitó mano de obra; la proveyó el campo con sus desplazados. La Revolución Transindustrial que acompañará al Covid- 19 no la necesitará, al revés. El excedente humano será enorme y fuente de posibles conflictos indeseables para las élites mundiales y mundialistas.
Por este motivo, se acrecentarán las políticas para reducir la población. Los llamados derechos reproductivos, la ideología de género y el derecho a una muerte digna serán las grandes tapaderas.
Como en la I Revolución Industrial, la transferencia de capital irá de abajo a arriba; de los pequeños y medianos capitalistas a los dominantes y de los Estados periféricos a los centrales nacidos de la nueva composición geopolítica.
De la misma manera que la I Revolución Industrial creó un cuerpo legislativo propicio a sus intereses, la Revolución Transindustrial hará lo propio. Sobrará gente, insisto; la pauperización será mitigada por un Estado tipo Cáritas, más asistencial que social. Si la Revolución Industrial trató de frenar las protestas obreras mediante métodos represivos, la Revolución del Covid -19 utilizará fórmulas más sutiles y efectivas encaminadas a controlar y condicionar el comportamiento humano; control frente a la antigua represión.
El objetivo es conseguir una “Dictadura sin lágrimas”, siguiendo la fórmula de la Sociedad Fabiana y que no tuvieron reparos en divulgar dos de sus miembros más notables y mefistofélicos: Aldous Huxley y Bertrand Russel, quien no tuvo reparo en afirmar:
“Poco a poco, mediante la cría selectiva, las diferencias congénitas entre gobernantes y gobernados se incrementarán hasta convertirse en especies casi diferentes. No veo cómo algún movimiento de rebelión interna pueda llevar alguna vez la libertad a los oprimidos bajo una dictadura científica moderna. Una rebelión de la plebe sería algo tan inconcebible como una insurrección organizada por ovejas contra la práctica de comer carne de cordero”
La OMS es un aparato dictatorial de catecismo cientifista, financiada abrumadoramente por capitales privados, cuyas resoluciones son de obligado cumplimiento por los Estados miembros.
La OMS es el paradigma definitivo del trasvase del poder a manos privadas. El máximo exponente, a día de hoy, de la “Dictadura sin lágrimas” de Huxley, que Russell tan cínicamente relató.
Las personas cuando están reunidas tienen un potencial conflictivo muy superior a cuando están dispersas. Se utilizará cuando sea necesaria la exitosa, por abrumadoramente acatada, fórmula “científica” de la pandemia, con distanciamiento interpersonal incluido.
Se implantarán políticas para disminuir la densidad de población, potenciando el retorno a zonas menos habitadas y, por tanto, muy fáciles de supervisar por la autoridad y la delación de los vecinos “solidarios”, ejemplo de la nueva ciudadanía.
A cambio de las migajas del Estado asistencial y sometido por los diferentes instrumentos de control del comportamiento, el ser humano será despojado de su racionalidad, su animalidad y, por supuesto, del sentido de trascendencia que alguna vez tuvo.
Su deshumanización le llevará a abrazar las creencias paganas más irracionales, llegando a implorar la protección de los espíritus de las aves, tal y como ya ha sucedido en ceremonias de consagración de diáconos en la llamada Iglesia católica de Australia. El Vaticano ha aceptado de hecho el paganismo panteísta para perplejidad de unos e incredulidad de otros. Mientras tanto la descristianización del catolicismo avanza imparable y con ella, la desprotección de la dignidad humana ante el nuevo valor de la Revolución Transindustrial de catecismo cientifista: el transhumanismo; la conexión del cerebro humano con los ordenadores.
Hollywood ya nos adelantó –como ha hecho otras veces- este futuro en la película Elysium y, como en ella, habrá diferentes categorías de chips para la conexión humanocerebral y ordenador, según el lugar ocupado en la nueva escala de poder; fundamentalmente habrá dos niveles: el de la élite dirigente y los demás; los niveles intermedios habrán desaparecido, prácticamente: Las dos especies preconizadas por Russell; ambas, deshumanizadas.
La racionalidad disminuida del ser humano le privará de capacidad de discernimiento. La anulación de su carácter trascendente convertirá su vida en un sin sentido. Ya no será más un animal capaz de buscarse el sustento ni de aparearse. Lo convertirán en una mascota bobalicona, feliz por recibir un terrón de azúcar de la mano de su amo, que lo castrará para evitar la última chispa de su naturaleza humana: la atracción entre hombre y mujer y el sentimiento superior que podría brotar de la misma, ya que este solo sentimiento haría posible el surgir de un imparable movimiento contrarrevolucionario.
¿Cuánto tiempo se estima que durará este proceso?: Cinco años. La experiencia de estos últimos 7 meses ha enseñado a qué velocidad pueden producirse los cambios hoy en día.
La implantación de la Nueva Normalidad estaría lista en 2.025. Justo a mitad de camino de la Agenda 2.020-2.030.
Afortunadamente, habrá más resistencia de la que esperaban.
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Sin tapujos
Marcelino Lastra Muñiz
mlastramuniz@hotmail.com
“…Los hijos de tus hijos vivirán bajo el comunismo. Ustedes los occidentales son tan crédulos que no aceptarán el comunismo directamente pero seguiremos alimentándoles con pequeñas dosis de socialismo hasta que finalmente despertarán y descubrirán que ya tienen comunismo para siempre. No tendremos que pelear con ustedes. Debilitaremos tanto su economía hasta que caigan como fruta madura en nuestras manos.
La democracia dejará de existir cuando les quiten a los que están dispuestos a trabajar y se lo den a aquellos que no»
Les guste o no, la historia está de nuestra parte. Los enterraremos»
Nikita Khrushchev. Primer Secretario del Partido Comunista de la URSS (1953-1964).
¿Me puedes decir qué medidas comunistas/socialistas se han ido implantando en España estos últimos 20 años?
Privatizar empresas estratégicas, y que los dueños de esas empresas ahora privatizadas sean organismos extranjeros no cuenta.
¡Un dos tres, responda otra vez!
Bravo de nuevo Mariano!
Cada vez hay más gente informada.
Fantástico. Ciertamente es el Transhumanismo el que se está implantando y todo porque hay algo que no mencionas y se está dando: la robotización crea una enorme masa desocupada.
El Covid les viene como anillo al dedo para acelerar el control demográfico indispensable para impulsar este proyecto.
La ciencia como el dinero, no es buena ni mala, todo depende de lo que se haga con ella. Para los creyentes del mito científico será deprimente experimentar que en el curso de la Historia no son más que otros ilusos que creen que la Historia empieza y termina con ellos. En el mito de la Ciencia creyeron los nazis y los soviéticos, y terminaron como terminaron.
La contrarrevolución que insinúas Marcelino podrá ser una de las últimas causas nobles que puede vivir la Humanidad. Así que sea. Guerra.
Si quieres guerra, echa unas partidas Fornite.
Hay que estar trastornado para decir y justificar semejantes palabras.
Menuda mente podrida y marchita de odio debes de tener.
Ya estamos en guerra bobo. Estamos en una guerra posmoderna.
Vosotros los necios y nosotros los cuerdos. Los que aceptan la realidad y la naturaleza del ser humano y los que os inventais la realidad y pretendéis doblegar la naturaleza humana y su pensamiento critico, su racionalidad.
Sois los totalitarios, los idiotas sabelotodo que no saben vivir sin la dependencia de los papás y del Estado. Quizas así lo entiendas mejor. Lo primero es excesivamente intelectual para un necio como tú.
Lo ves? No hace falta odiar cuando se razona porque vosotros llamáis odio a todo aquello que supone llevaros la contraria. Sois así de fascistas y chupatintas.
Solo roznas Angel Manuelito. Rozna, rozna campeon. Ale tira perrocscerolas barriobajero peligroso.
… «nosotros los cuerdos» dice el perrocacerolas chalao jajajaja jajajaja. Si es que eres muuuuu tontooo Angel Manuel Sanchez García pero muuuuchooo muchooo. Ahora llama a tu ejército de nicks anónimos Batman, Francisco Franco, Mojame, pablo iglesias, etc etc etc y que sigas roznando «anónimamente bajo pasamontañas».. Jejejeje.
La guerra sucia es cosa de otros, otros como tú. Yo no me mancho con trolls como tú. No soy Manchón.
Rozna, barriobajero rozna. Ale tira perrocacerolas.
Como decía el filósofo Heráclito de Éfeso, «no hay nada permanente excepto el cambio”.
No es tiempo de elucubraciones…..
Y estos no son ni los entrantes, aún os queda mucho por tragar (además de toda la mierda que ya os habéis tragado con las mascarillas). Y rezad porque así sea, porque,o hay justicia o habrá venganza.
https://www.abc.es/espana/abci-asociacion-lleva-pedro-sanchez-ante-haya-delitos-lesa-humanidad-gestion-covid-19-202006091524_noticia.html
Justicia, todos queremos justicia… Sobre todo por los protocolos asesinos de la gestión de Residencias. Tarde lo que tarde..o habrá venganza.
No sigáis despreciando las miles de personas que murieron solas en sus casas o al poco de su ingreso en urgencias sin que hubiesen recibido un solo reconocimiento médico. El «Quédate en casa hasta que no puedas respirar» se os va a atragantar. Y esos ‘protocolos’ fueron ordenados por el Ministerio de Sanidad y el gobierno central.
https://www.elespanol.com/espana/madrid/20200425/muertos-casas-coronavirus-solo-madrid-dramaticas-llamadas/484952559_0.html
Los protocolos son de las CCAA. A ver si te enteras, que parece que se te atragantan a ti. En mala hora llegó esta pandemia a un país donde la asquerosa derecha solo miró por su sanidad privada y nos dejó desmantelada de material y personal sanitario. Justicia…!!!
…este pais no perdonará a quienes prefierieron ladrillos, cemento, autovias radiales y corrupcion, a mantener los servicios sanitarios públicos que necesitamos. Repito….justicia!!
No te olvides tampoco del gobierno de los viernes sociales, miles de millones destinados a los chiringuitos no a la Sanidad.
Impresionante el artículo del enlace. De todo esto no nos han informando. Miles de personas muertas por las órdenes de Simón.
Gracias por informar.
Hay que tener muy pocas luces para decir lo que has puesto. Madre mia qué ignorancia.
Recuerda: el machismo mata más que el coronavirus.
No te pases princesa. No nos compares con el Sars 2. A nosotros solo nos gusta que estéis en casa cuando llegamos del bar o de los toros, que os vistais como queramos nosotros, y que seáis nuestros floreros particulares, por eso soy de VOX, y si hay que enseñaros la palma de la mano es para enseñaros de vez en cuando quien manda en casa. Está claro bonita?.
Eso! Azota la hasta hacerla sangrar como decía el Coletas hoy Moño.
Confundes fantasías sexuales con delitos machistas jajajajaja. Pobre Javi, tu seguro que sólo misionero y con la luz apagada. Abre la mente y disfruta.