Después de que en el mes de marzo se paralizase la actividad por la declaración del estado de alarma, y tras varios meses de preparación y análisis de la situación, el Ayuntamiento de Manzanares ha decidido volver a poner en marcha los cuatro museos municipales con un nuevo y estricto protocolo de seguridad que permite disfrutar del turismo y el patrimonio local con todas las garantías. Así lo ha anunciado la concejala de Turismo, Gemma de la Fuente, quién asegura que se siente “muy contenta” de poder reanudar la actividad en el municipio de forma “muy segura”.
De este modo, abren sus puertas de nuevo al público, y con carácter gratuito como hasta ahora, el Museo Manuel Piña, el Archivo-Museo Ignacio Sánchez Mejías, el Museo del Queso y Colección de Arte, y el Molino Grande, además de ponerse en funcionamiento completo la Oficina de Turismo. Se mantienen los horarios habituales, pero se reducen los aforos de visitas y se anulan las degustaciones y catas del Museo del Queso.
Esta reapertura forma parte de un plan más ambicioso que se ha propuesto el Equipo de Gobierno de Julián Nieva para reactivar el turismo “en destino, y del destino”, según avanza De La Fuente, que asegura que se están ultimando los detalles de la que será la próxima estrategia de promoción de Manzanares, que será presentada en las próximas semanas bajo el paraguas ‘Manzanares te gustará seguro’ “con el objetivo de promocionar la ciudad como destino de interior seguro, y reforzando la potencialidad que tiene en materia turística. Pocas poblaciones pueden presumir de tener espacios museísticos que aúnen vanguardia y tradición, únicos en su temática”.
Para la edil manzanareña, los recursos turísticos de la localidad son “de uso, y no al uso”, por la gran cantidad de actividades que siempre se han realizado en ellos, y la constante divulgación de los mismos con el fin de que “cada año se superen y vengan más y más turistas, para que repercuta en la economía de la ciudad”.
Medidas de prevención
Entre las medidas de prevención para evitar el contagio de la COVID-19, se incluyen pautas destinadas al turista y a los trabajadores de los museos. De este modo, a las ya extendidas en toda la población del uso obligatorio de la mascarilla, el lavado de manos o uso de gel hidroalchólico, y la distancia de seguridad, se suman la limpieza adicional de las instalaciones -entre la que destaca la limpieza de aseos después de cada uso-, la reducción del aforo o las visitas guiadas previa cita y para un máximo de 9 personas.
Para las visitas en grupo, los guías utilizarán pantalla facial y guantes para no contaminar los objetos que se muestran a los visitantes; además, se tomará la temperatura a la entrada a los museos y se utilizarán exclusivamente los espacios más amplios para realizar las explicaciones.
Para las visitas por libre se han marcado recorridos de entrada y salida, se prohíbe tocar piezas y superficies, y se aconseja el uso de las escaleras en lugar del ascensor. La entrega de folletos informativos se hará de manera individual, no estando éstos a disposición del público.
En el caso del Archivo de Sánchez Mejías, quienes consulten documentación de la biblioteca deberán seguir las medidas específicas para ellos; una vez finalizada la consulta, los documentos pasarán una semana de cuarentena. En la tienda se desinfectará el mostrador tras el paso de cada cliente.
