La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) lamenta la «inacción» de la Dirección Provincial de la Tesorería General (TGSS) e Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) de Ciudad Real en la aplicación de medidas para evitar el contagio de coronavirus tras el positivo de una funcionaria y reclama actuaciones urgentes para garantizar la seguridad de los trabajadores.
El sindicato tuvo conocimiento de un positivo de COVID-19 en el edificio principal de la Delegación Provincial del TGSS/INSS situada en la Plaza del Pilar, según ha informado en nota de prensa. «Sin embargo, y a pesar el requerimiento llevado a cabo por los delegados de Prevención de Riesgos Laborales de CSIF mediante escrito presentado el pasado 27 de agosto, la administración aún no ha tomado ninguna disposición».
CSIF reclamaba el cierre de la planta afectada dentro de un edificio que cuenta con siete alturas, así como la desinfección del espacio de trabajo con un viricida homologado, que no limpieza, y las habitualmente aconsejadas por el Ministerio de Sanidad.
«A día de hoy, dicha Dirección Provincial ha obviado todas las consideraciones, dando la callada por respuesta continuando la actividad normal, tanto en la zona afectada como en el edificio. De hecho, no se ha desinfectado la planta, ni tan siquiera la zona afectada», sostiene el sindicato.
«Es más, CSIF tiene constancia de que la empresa de limpieza no ha actuado en la zona, más allá de labor rutinaria, al no tener constancia del positivo. Además, una semana después, los representantes legales continúan sin tener notificación oficial, lo cual supone un grave incumplimiento a la normativa existente», enfatiza.
«La única excepción ha sido proceder al cumplimiento de la cuarentena declarada a la afectada y al funcionario más próximo, y los PCR a ambos pautados por Sanidad», dice. «Sin embargo, una funcionaria ubicada en la mesa más próxima a la afectada ha continuado trabajando desde entonces sin que conste desinfección. Se ha limpiado, al parecer, de manera intensiva, la mesa de dicha funcionaria cinco después del positivo, habiendo estado trabajando todos los días anteriores sin actuación previa alguna».
Según CSIF, «en el edificio está absolutamente prohibido abrir las ventanas y de hecho no disponen de picaportes, la ventilación natural es inexistente y la forzada ni se ha planteado». «Al mismo tiempo, en todo el edificio, hay instalada una moqueta absolutamente insalubre, nido de todo tipo de gérmenes, la cual debería haber sido sustituida hace un mínimo de 10 años. A ello se une el funcionamiento normal del aire acondicionado, sistema que se presenta como posible potenciador de la transmisión de posibles virus Covid, según fiables estudios realizados», dice.
En definitiva, CSIF considera una «auténtica bomba de relojería» la situación actual en la Dirección Provincial del INSS/TGSS, «que además cinco meses después del inicio de la pandemia aún no dispone de un protocolo de actuación para afrontar estos episodios, además de que resulta increíble la inacción ante este caso positivo».
«Da la impresión de que se prima la gestión sobre la salud de los trabajadores, o, cuanto menos, se ha obviado la gravedad de la situación que estamos atravesando», concluye.
Hay que estar en alerta, pero sin generar alarma….
¡Qué tontismo eres, Charly!
Les habrá llegado el virus a través del teléfono??????????
Eso mismo he pensado yo… si ya tienen un contagio sin atención al público cuando empiecen a ejercer….
Pero como vivimos en una dictadura comunista pues Habana o na na.