El grupo de teatro Epidauro y el historiador Manuel Ciudad consiguieron en los últimos estertores del pasado viernes algo que fascinó a los muchos asistentes a la ruta nocturna teatralizada de patrimonio, actividad propuesta para un verano alternativo de actividades por parte de la Concejalía de Cultural de Argamasilla de Calatrava.
Una oportunidad para divulgar y conocer la historia de esta población ciudadrealeña visitando cuatro escenarios emblemáticos del casco urbano, como la casa de los Tercios, la plaza consistorial, la casa de la Inquisición y la plaza del templo parroquial, donde el elenco encarnó otras tantas escenas tras las nociones que iba dando el investigador.
Primero se expuso cómo eran esos tributos que la administración de la época recogía, los diezmos cuya tercera parte daba nombre a estancias y calles como La Tercia que también existe en Argamasilla de Calatrava, mostrando frente a la casa que aún conserva un escudo de aquella distinción la forma de llevar en especie el impuesto.
Y desde las escalinatas consistoriales, Manuel Ciudad explicó la curiosa fórmula de elección de los alcaldes, con la particularidad de que en época de la Orden de Calatrava existían dos y a estos cargos optaban sendos sectores de la sociedad de la época, uno por la parte noble y la otra por los ciudadanos comunes.
El siguiente destino fue ante la finalmente restaurada casa de la Inquición, para hacer referencia a lo que eran en aquella época de la Edad Moderna las encomiendas y la figura del comendador, cuyo representante de Epidauro y, demás compañeros del cuadro, escenificaron la manera en que dicho cargo recibía el parabién oficial.
El último punto de la cita, que se iba anunciando en los trasiegos al toque de tambor y a la que seguía también una nutrida cohorte de asistentes, que guardaron en todo momento la distancia de seguridad y las mascarillas, respetando así escrupulosamente las medidas anti-covid, fue junto a la iglesia de La Visitación de Nuestra Señora.
Allí el historiador expuso los orígenes de la Parroquia de Argamasilla de Calatrava y se representó, en un pretendido día de San Miguel, la manera en que el demudado prior extendía la bendición a alcaldes, dando también paso a epidemias de aquella época como la de la peste negra y la propagación de otras plagas o el hambre de las gentes, pidiendo por todo ello regio amparo, limosna a fieles y protección a los santos mártires.
“Es una actividad que nos hace especial ilusión porque, además de conocer la historia de nuestro pueblo y otras características no tan conocidas, le ponemos punto teatralizado gracias al Grupo Epidauro; va a gustar mucho a la gente y al final es algo que nos enriquece culturalmente”, explicaba Estela Céspedes en los prolegómenos al evento.
La concejala de Cultura reconocía al respecto el papel de Manuel Ciudad, quien por un lado “nos aporta su sabiduría histórica y su profesionalidad”, refiriendo que si bien no es la primera vez que se hacen rutas teatralizadas en Argamasilla de Calatrava, “quizá no eran tan reales como lo que vamos a vivir hoy, porque es historia de nuestro pueblo”.
“Sitios emblemáticos”, apostillaba la edil, “que quizá nos sorprendan cuanto atesora nuestra localidad y lo que de trascendente supuso en la antigüedad”, de forma que como se ha dicho , se pudieron redescubrir “edificios que hoy pueden tener otros fines pero que antiguamente perfectamente podrían ser casa del comendador, por ejemplo”.
El aludido, por su parte, tan ducho en ensayos, estudios publicados y conferencias públicas, se bautizaba empero este viernes en la dirección de una propuesta divulgativa teatralizada y que “cuando me lo propusieron los miembros del Ayuntamiento de Argamasilla de Calatrava, acepté enseguida por dos razones”.
Y justificaba que “por un lado, es una manera de devolver la deferencia que ellos siempre han tenido conmigo; pero también, porque me parece una manera muy interesante de llevar la historia a la gente, en este caso los habitantes de Argamasilla, en combinación con los miembros del teatro del Grupo de Teatro Epidauro”.
En este amplio deambular entre el alto Medievo y el siglo XVI fue fundamental, como se ha referido, el papel de los papeles que esta formación local de aficionados al arte dramático interpretaron, algo que fue posible gracias a los datos históricos y guion que les facilitó el también profesor de Geografía e Historia en el IES ‘Leonardo Da Vinci’ de Puertollano.
“Ellos aportan su arte y su teatro”, apostillaba Céspedes, quien les agradecía hacerlo en esta época de calores y ataviados también con medidas de protección como la mascarilla, que únicamente se retiraron para poder hacerse bien oír entre quienes se congregaron en tal noche de verano, para vivirla cual sueño en la Historia.