El Gobierno de Castilla-La Mancha, junto a los Ejecutivos de Aragón y Castilla y León, pedirá declarar a la provincia de Cuenca como zona de muy baja densidad de población – inferior a 12,5 habitantes por kilómetro cuadrado– para que acceda a ayudas europeas de compensación a las actividades económicas aprobadas para los países nórdicos.
Así lo ha avanzado el vicepresidente regional, José Luis Martínez Guijarro, hoy, durante el debate general sobre las ayudas de la Unión Europea a España como consecuencia de la pandemia de la COVID-19 y su repercusión para Castilla-La Mancha, donde ha señalado que esta solicitud se extenderá también a Teruel y Soria, así como a otras zonas adyacentes a estas provincias con similar densidad poblacional.
El encuentro, previsto para el próximo 3 de julio en Soria, servirá a las tres autonomías para avanzar en una posición común frente al reto demográfico que incluye la propuesta una deducción del 20% de la Seguridad Social a las empresas ubicadas en determinados territorios con baja densidad de población, con el objetivo de que sirva de revulsivo para el empleo en estas zonas.
La brecha digital en el ‘Next Generation EU’
En su intervención, el vicepresidente ha detallado algunas de las medidas que componen la propuesta del Plan de Recuperación de la Unión Europea, presentado el pasado 27 de mayo y a la espera de ser aprobado por el Parlamento Europeo y el Consejo de Ministros de la Unión, que ha venido a llamarse ‘Next Generation UE’ y que contempla 750.000 millones de euros de presupuesto a largo plazo, además de elevar temporalmente el límite máximo de recursos propios al 2% de la renta nacional bruta de la Unión.
Martínez Guijarro ha explicado que algunos de los instrumentos que contempla el ‘Netx Generation UE’ serán de aplicación directa y, en el caso de la Iniciativa REACT-EU, vendrá a reforzar los programas operativos regionales, toda vez que se contempla que los fondos para desarrollo rural se complementen con 15.000 millones procedentes de este Plan de Recuperación.
En este sentido, el vicepresidente ha incidido en que el Ejecutivo castellano-manchego comparte con la Comisión Europea que la digitalización sea una prioridad para la asignación de estos fondos, ya que supone una “oportunidad” para Castilla-La Mancha que haya fondos destinados a la digitalización “y que permitirán salvar la brecha digital entre el medio rural y el medio urbano”.
Por último, ha recordado que a lo largo de la pasada legislatura el Ejecutivo de Castilla-La Macha extendió la cobertura el servicio 3G a un total de 846 localidades, lo que supone que 9 de cada 10 localidades de la región disponen ya de cobertura 3G o 4G y que más del 99% de la población castellano-manchega está cubierta por este servicio.