Los Coordinadores Provinciales de Izquierda Unida y el Coordinador Regional de IU CLM han pedido por carta al Presidente de la Junta de Comunidades, Emiliano García-Page, cautela ante el debate suscitado por la evolución de las provincias en el Plan de desescalada.
Dicha carta está firmada por los Coordinadores Provinciales de Izquierda Unida de, Ciudad Real, Guadalajara, Cuenca, Albacete y Toledo, Pedro Mellado, Elena Loaisa, Jacobo Medianero, Daniel Martínez y Mario García, y el Coordinador Regional de Izquierda Unida Castilla-La Mancha, Juan Ramón Crespo.
La formación de izquierdas considera que “los responsables políticos autonómicos deben comprender que la fase en la que se encuentren nuestras provincias o la velocidad de su progreso no ha de entenderse como un elemento de prestigio o calificación sobre la gestión, capacidad de respuesta o previsión”.
Avisan en dicha misiva que: “Nadie tiene ninguna responsabilidad derivada de que el virus haya golpeado con especial virulencia nuestras provincias, motivado por razones que aún se desconocen y que podremos valorar en la medida en que las investigaciones puedan ir aportando evidencias al respecto”.
“Dadas las circunstancias tan graves y recientes como las que hemos sufrido, creemos que debe primar la prudencia, algo que seguro compartimos. Por eso también creemos que por parte de los dirigentes autonómicos esa prudencia se debe extender a las declaraciones que puedan generar falsas expectativas en los comerciantes y pequeñas empresas que esperaban el cambio de fase para poder retomar su actividad. Esto genera frustraciones innecesarias en colectivos que viven con gran incertidumbre su futuro” han explicado los diferentes cargos públicos de Unidas Podemos-Izquierda Unida en la región.
Así, declaran que: “recuperar la normalidad lo antes posible nos permitirá recuperar la actividad económica necesaria en mejores condiciones para garantizar la recuperación social de esta grave crisis. Pero sobre todo compartimos el alivio de muchos de los alcaldes y alcaldesas de nuestras provincias con la decisión del Gobierno de España de mantenernos al menos una semana más en la fase 0”.
Por último, entienden que “si fuera necesario por motivos de seguridad mantenerse otra semana más en la fase 0, que así sea. Podemos permitirnos ir más despacio de lo deseado, pero no ir más deprisa de lo recomendado. El peor de los escenarios sería provocar una vuelta atrás con un coste humano, social y económico inasumible”.