La pereza debilita. Si la pereza física provoca falta de fondo físico y pérdida de masa muscular, la pereza mental provoca infantilismo ydificulta nuestra capacidad de ampliar el foco de observación y relación sobre las cosas.
Pensar requiere esfuerzo y voluntad. A veces no entendemos (o no queremos entender) las decisiones de propios o extraños, porque nuestra decisión o motivación pueden ser distintos de las que toma el “otro”. Tal vez no fuera tan difícil si hiciéramos el esfuerzo de ponernos en su lugar. Pero una vez puestos, debemos respondernos con honestidad: ¿teníamos razón, o no, para criticar? Sin embargo ¡Qué difícil resulta corregir nuestras propias decisiones, nuestras propias convicciones!
No hemos aprendido. No se puede pedir aguante cuando se ve cada vez a más gente aprovecharse del sacrificio de otros, de uno mismo, y se dan mensajes de reprobación constantes que relativizan el valor de la obediencia, en estas circunstancias. Se pretende ordenar la salida a la calle en franjas horarias para evitar aglomeraciones, pero a la vez estamos estudiando la posibilidad de desobedecerlas. Para algunos, incluso resulta un duro esfuerzo mental asimilar el horario. No se puede pedir ahora madurez ciudadana, cuando durante tanto tiempo se ha estado alimentado la docilidad. Es mejor que piensen otros, listos y expertos avalados por un dudoso currículo; pero que si salen por la tele, será porque lo valen ¿no? Que inventen ellos. El mensajero es lo que vale, no el mensaje.
Aquí han pasado dos meses mal contados en el que el aire se ha purificado, y ya creemos que se va a revertir el cambio climático. Han llegado las lluvias de abril, y pensamos que los pantanos se habrán llenado. Ahora que las UCI´s ya están descongestionadas, seguimos aplaudiendo el sacrificio de los sanitarios como si fuera el primer día (cuando la nueva situación requiere otro tipo de gestión – incluyendo el mantenimiento del refuerzo del personal sanitario). Los que han hecho teletrabajo, creen que ya hemos cambiado de mentalidad, y que en adelante vamos a producir por objetivos, no por horas. Se anuncia que la caída de la economía va a tener unos niveles equiparables a los peores de una postguerra, y aquí vamos a aprovechar para construir un mundo nuevo y feliz. Sí, creemos posible otro mundo distinto que nos guste más. Necesitamos un cambio de paradigma. Pero para lograrlo, tenemos que tomar todos conciencia de nación, de la necesidad del concurso colectivo, el esfuerzo, y la complejidad de esa tarea. Y seguir empujando en esa línea. De lo contrario, seguiremos como estábamos – lo que a juzgar por el tipo de preocupaciones que muestra la gente, es lo más probable – o peor. Ya falta poco para que cada uno exija volver a los parámetros anteriores a esta crisis
Pensemos. Se critica que haya habido improvisación ¿pero cómo no se va a improvisar ante una emergencia? Se da la paradoja de pedir a gente de izquierdas que todo sea perfecto cuando a la vez se afirma que la izquierda es incapaz de hacer nada bien, por definición. Se pide al Gobiernoque dialogue a tiempo y ordenadamente con todo el mundo (como hace Díaz Ayuso, que cuando no se cuela en el orden de intervención en las conferencias de presidentes por el aterrizaje de un avión, se cuela por asistir a una misa).Han pasado cincuenta días del inicio del confinamiento ¿es posible ya hacer tests masivos en nuestro país? Sabemos que no es posible, pero alimentar esa posibilidad es entrar en un juego perverso de paranoias, y alimentar la crispación en aquellas personas que puedan creerlo. ¿Se ha adquirido material sanitario defectuoso adrede? No¿Ha sido suficientemente honesto el mercado de estos productos, en su fabricación y en los márgenes de beneficios de su distribución? Parece que tampoco. El presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijoo, valora la posibilidad de estirar la legislatura un poco más ante la dificultad que entraña ahora todo el proceso electoral, pero algunos piden que el Gobierno de España dimita ya. Cuando la semana pasada los niños pudieron salir a la calle, o cuando se salió el 2 de mayo a hacer compra en el hipermercado, la gente se mostraba preocupada por las situaciones de apelotonamiento. Pero cuando ayer se cerró el hospital de campaña en IFEMA, en Madrid, se hizo una fiesta con bocatas de calamares y selfies incluidos. Me pregunto qué capacidad de gestión tiene la Presidenta madrileña, cuando fue incapaz de controlar el aforo de ese evento. Pablo Casado pide que el Presidente Sánchez presente una moción de confianza. Me pregunto si la confianza de sus votantes la obtiene más por el valor de la marca P.P. que por el de su propia persona:la actual cúpula del P.P. sigue creyendo que, si el discurso es el mismo, volverán los antiguos votantes que se fueron a Vox, y que éstos a su vez volverán a la casa común de la mayoría natural… sin querer entender que son sus liderazgos los que marcan la diferencia de credibilidad, y que Vox tiene más futuro porque su caladero de votos está entre gente más joven que la del P.P.
¿Para qué vamos a prestar atención a la economía? El 23 de abril, en un momento de incertidumbre para todos los países, nos creímos que la Unión Europea había llegado a un acuerdo para habilitar un fondo de recuperación de 1,5 billones de € mediante transferencia. Solo 7 días después, ahora que la alarma y la crítica por la insolidaridad comunitaria se ha relajado, matizan: la Unión Europea rebaja la cuantía a 0,3 billones de € (300.000 millones) y rebajan la ayuda a categoría de “iniciativa de recuperación”. O sea, que volvemos poco más o menos al punto de salida. Pero no parece que esto interese mucho a los españoles, cuya mayor preocupación parece ser cuándo y cómo van a poder ir a los bares. Para los “europeístas” y el Gobierno, es un fracaso estrepitoso. La Oposición tampoco va a sacar partido de una decisión que han propiciado sus socios en el Parlamento Europeo y que perjudica a España. Además, tiene más aceptación popular seguir criticando al Gobierno de España por asuntos de competencia autonómica: al minsitro de Sanidad, Salvador Illa, por la gestión en los hospitales, y a Pablo Iglesias por la mortalidad en residencias de mayores. Hasta García Page echa la pelota de su cuestionable gestión sobre el tejado de Pedro Sánchez. Ya puestos ¿por qué no culpar a Felipe VI? Es igual, nosotros, a lo nuestro ¿Cuándo han dicho que se acaba la liga de fútbol?
Pares y nones
Antonio Fernández Reymonde
Así es, amigo Antonio.
Totalmente de acuerdo.
Mi aplauso al análisis.
Por estos lares no esta bien criticar o exigir responsabilidades a quienes nos dirigen. A aquellos a los que les toca tomar DECISIONES.
No al menos, sin que rápidamente aparezcan numerosos adlateres agradecidos, entregados en cuerpo y alma a la causa de su patrón, faltándote el respeto por haber tenido la osadía de enjuiciar una nefasta gestión, y recurriendo al insulto fácil cuando se les acaban los argumentos. Fascista, voxtrenco, facha, retrogrado, difamador, etc. son algunas muestras del gran repertorio de esos que van dando lecciones de democracia, pero que no hay nada más autoritario que señalar e insultar a quien no comulga con tus ideas. Sencillamente se llama RESPETO.
La edad te da una tranquilidad y un sosiego que hace que te resbalen todos esos insultos.
Está claro del pie que cojea el articulista. Perfecto. Cada uno defiende lo que le venga en gana. Y otros pensamos que no basta con poner paños calientes, y que toca asumir responsabilidades.
Claro que ha habido improvisación, donde no tuvo que haberla habido, por mucho que trate de justificarla mediante una situación de emergencia.
Este gobierno ya tenia información oficial sobre la mesa en enero, que desvelaba lo que se nos venía encima. Que esto era algo más que una «gripecilla». Pero prefirieron mirar para otro lado. Desacreditar a aquellos que lo avisaban. Anteponer sus intereses partidistas a razones de salud pública. No es comprensible que se pasase del todo al nada en cuestión de tres, cuatro días. De estar alentando a la gente a salir a la calle a manifestarse, y pocos días después a un confinamiento absoluto. Y esto no tendría más importancia si no fuese porque se trataba de vidas humanas. Más de 25000 hasta el momento (según cifras «oficiales» u «oficiosas»).
Sabían de la facilidad de contagio. De que cada uno de nosotros podíamos ser verdaderas bombas contagiosas andantes. Que los contagios se podían multiplicar de forma exponencial.
Pero había que dar gusto a la Ministra cuyo CV cabe en un «post it», y de la que no se ha vuelto a saber. Escondamos las vergüenzas. Por cierto, no estaría mal que alguno de los articulistas de este medio hablase del nepotismo del que esta inundado nuestras instituciones y organismos.
Cifras demasiado contundentes para justificarlas con una simple situación de emergencia. Algunos, creemos que no solo hay responsabilidad moral, si no también penal.
Las cifras «oficiales» u «oficiosas»:
25000 fallecidos a nivel nacional.
2498 fallecidos a nivel autonómico.
Demasiadas.
Buenas tardes.
No te confundas. En estos lares,difiero de ti, hay diversidad de opiniones, pareceres e ideologías. No te equivoques: algunos no tenemos patrón a quien obedecer o agradecer nada, ni discrepamos de lo expresado en tus artículos ,criticando la gestión de un gobierno, porque seamos unos aduladores de los mandamases . Es incierto, nadie o casi nadie te insulta a ti, rebatimos el tono y el tenor de tu discurso. Mostramos, como mucho, un tono airado como respuesta a esa escritura tan beligerante y faltona que acostumbras a emplear.
Creo que pecas de un exceso de soberbia que te impide ver que sin credibilidad no se gana el respeto de nadie, ese respeto que se le profesa a Antonio Fdez., por ejemplo. Es evidente que redactas tus textos con premisas deshonestas, porque habitualmente partes de un personaje a quien detestas, llámese Iglesias, Montero, Perico o Marica para convertirlo en un pelele a quien vapuleas sin compasión aunque para ello tengas que inventarte un relato ficticio que los deje en mal lugar. De hecho, no necesitan equivocarse para hacerles objeto de tu lengua de áspid
Te jactas de imparcial , pero es la segunda vez que acusas a una ministra de tener un currículo cuya extensión cabe en un post it, o de ser ministra de igual-da, según tus propias palabras. Es la única con ese currículo tan magro? , ¿ Qué currículo, al margen de la sopa boba de la política, tienen Sánchez, Casado, Abascal o Arrimadas? Porque la nómina de políticos actuales y ya jubilados que no han hecho otra cosa que vivr de la mamandurria es muy abultada.
Sin credibilidad no se gana el respeto, D. Sinsentido.
Sin realismo tampoco.
La realidad nos fuerza a ser con ella u honestos o deshonestos.
No es tibia.
Por cierto, D.Antonio, me ha gustado su artículo.
‘Salir de cañas’ es casi patrimonio nacional. Es lo que hay…..
La izquierda en el poder al menos tiene el consuelo de que no gobiernan los fachas.
Cuánto que aprender de la humilde y eficaz izquierda portuguesa.
Apollardada sigue la izquierda a la que le ha entrado la jaqueca despues de la borrachera, del poder…y la responsabilidad.
Entró como entró en el poder…saldrá peor.
Sin test y sin capacidad de gestión…ni siquiera nos dicen la verdad…porque qué es la Verdad????
Aquello que para los agnósticos se llamaría Realidad…y hace libres.
Y es que conozco a muchísimas personas que dejaron de ser…de izquierdas…
Pero al revés muy pocas…Bestringe…y esa casta que provenia de los cuadros de Falange y se colocó muy bien en el PSOE.
A partir de ahí…nada.
La izquierda se asemeja a una secta.
La izquierda en España porque nunca fue de España…
Salvo contadas excepciones muy críticas en lo que se ha convertido el partido de Pedro Sánchez.
Hay en la vida de toda persona un momento en el que se asoma a un precipicio y tiene que decidir…
Aceptar o rechazar su realidad.
Las consecuencias de esa decisión son tremendamente influyentes en otras más pequeñas.
La izquierda en España es adolescente.
Siempre dando en el clavo, Antonio