La Asociación Provincial de Empresarios de Transporte de Mercancías (ATM) reconoce sentir una alarmante preocupación por la situación que vive el sector, pese a ser reconocido como actividad esencial y jugar un papel fundamental en el marco de la crisis global en la que se está inmerso.
Los transportistas no sólo se enfrentan a un drástico descenso de la actividad (42% en carreteras nacionales, más acuciante aún en el caso del transporte internacional), sino en la imposibilidad de encontrar viajes de retorno, la morosidad en los pagos, falta de acceso a ayudas específicas y un largo etcétera, que hacen peligrar la viabilidad del transporte en un futuro no muy lejano.
En palabras del presidente de la ATM, Carlos Marín “ en la práctica, alrededor del 90% de los costes se deben solventar al contado, como es el caso del combustible, letra del camión, etc., a pesar de que el cobro de los servicios cada vez se demora más…” .
Por ello, desde la organización empresarial de transporte se reclaman medidas específicas para el sector, además de las ya establecidas en materia tributaria y laboral para todos los sectores económicos, que se traduzcan en una flexibilización o moratoria en el pago de las próximas cuotas mensuales de financiación de los vehículos de transporte (préstamos, leasing y otros), arbitrar los mecanismos legales que permitan la baja temporal de los seguros de los vehículos que se encuentren inactivos de forma flexible, y el aplazamiento del pago de las últimas facturas del carburante a las compañías petroleras.
Marín, haciendo hincapié en el tema de la morosidad en los pagos, propone “la creación de un plan de pago a proveedores mediante líneas de avales, que compense en cierta medida los impagos sufridos durante y posteriormente a la crisis”, toda vez que la línea de ayudas ICO COVID-19 aprobadas por el Gobierno de España para combatir los efectos del coronavirus deja fuera, en gran medida, al transporte de mercancías por carretera.
“Estas ayudas, gestionadas a través de las entidades financieras no llega al sector del transporte de mercancías, y muchos autónomos y pymes se han encontrado con respuestas negativas, tal y como nos han comentado muchos de nuestros asociados”.
La ATM alerta de una «quiebra inmediata y desaparición de miles de autónomos y pequeñas empresas de transporte por la imposibilidad de atender a sus pagos más inmediatos, si no se empiezan a tomar medidas al respecto».